En la estación Villa de Cortés, 5 intoxicados con gas lacrimógeno

Mueren inspector de vías y una pasajera en dos accidentes ocurridos en el Metro

JOSEFINA QUINTERO M.

Dos personas murieron ayer en instalaciones del Sistema de Transporte Colectivo-Metro. El primer deceso ocurrió por la mañana, cuando el inspector de vías Humberto Arce Guerrero realizaba una revisión de rutina en la interestación de Aragón a Eduardo Molina y fue arrollado por un convoy. El segundo hecho sucedió en la estación 18 Marzo, cuando una joven de 19 años quedó atorada entre las puertas y fue arrastrada por el tren.

En tanto, a las 19 horas se suspendió el servicio durante 10 minutos en la estación Villa de Cortés de la línea 2, debido a que varios pasajeros resultaron intoxicados a causa de gas lacrimógeno que emanaba de un recipiente que se encontró en el andén.

Alrededor de las 9:16 horas Arce Guerrero realizaba una supervisión en la interestación mencionada de la línea 5, para dar mantenimiento a las vías, en compañía de otras dos personas, como lo había hecho durante 10 años. Sin embargo, fue arrollado por el convoy, a pesar de que tomaron las prevenciones necesarias para los trabajos de inspección, que consisten en informar al puesto central de control que hay gente en vías para que los conductores reduzcan la velocidad y avisen de su paso sonando la bocina.

Sus acompañantes, otros dos inspectores -que tenían la obligación de caminar en sentido contrario para avisar la cercanía de los trenes- fueron hospitalizados debido a la crisis nerviosa en que se encontraban. Asimismo, Juan Pablo Santiago, conductor del tren, fue internado en estado de shock.

El segundo accidente ocurrió alrededor del mediodía, cuando Guadalupe Antonia Jiménez iba en compañía de su amiga Graciela Lobato en la estación 18 de Marzo, en dirección a Indios Verdes. De acuerdo con la versión de Graciela Lobato, en un descuido Antonia bajó del tren y al intentar regresar, pues se percató de que aún no llegaba a su destino, el convoy cerró las puertas y ella quedó atorada.

El tren reinició su marcha y la joven no logró soltarse, fue arrastrada y su cuerpo se estrelló contra una pared. Algunos usuarios manifestaron que accionaron las palancas de seguridad pero el convoy no se detuvo. La Procuraduría General de Justicia del DF inició dos averiguaciones previas para deslindar responsabilidades.

Por su parte, el director del Sistema de Transporte Colectivo-Metro, Javier González Garza, manifestó que se investigan los hechos para colaborar en las indagaciones que realiza la procuraduría. Agregó que todo está registrado en la caja negra, "por medio de la cual podemos saber lo ocurrido".

Respecto de lo sucedido en Villa de Cortés, personal de Protección Civil que acudió al lugar explicó que los usuarios percibieron un mal olor en la estación y lo reportaron al área de seguridad; al arribar el convoy, volteó la lata que contenía el gas y éste se esparció por el andén, lo cual provocó irritación en los ojos, comezón y náuseas en las personas que se encontraban cerca. Cinco pasajeros requirieron atención médica.