Perderían su función pública, dice el rector de la UNAM
Error, querer hacer rentables las instituciones de salud: De la Fuente
"Pese a la falta de recursos, la investigación va prosperando"
ANGELES CRUZ
Las instituciones de salud no están diseñadas ni se les puede exigir que sean rentables económicamente, como ahora se pretende, ya que por su carácter público deben ser la expresión del compromiso social del Estado mexicano en beneficio de quienes viven en condiciones de pobreza, afirmó el rector de la UNAM, Juan Ramón de la Fuente.
Durante la sesión de la Academia Nacional de Medicina (ANM), que se realizó con motivo del 30 aniversario del Hospital General Manuel Gea González de la Secretaría de Salud (Ssa), De la Fuente, quien actualmente preside ese órgano académico, resaltó que entender el desarrollo de la medicina pública implica necesariamente reconocer su vocación humanista y compromiso social, el cual se refleja en una característica fundamental que debe preservarse: su gratuidad.
Indicó que la fusión de estos factores con las tareas del Estado social mexicano permitieron en el siglo que recién acaba de concluir, la creación y desarrollo de los hospitales públicos, como el Gea González, los cuales, a pesar de sus enormes limitaciones, han logrado consolidarse como piezas fundamentales de nuestro sistema nacional de salud.
En su discurso al final de la sesión académica, De la Fuente retomó algunos de los datos estadísticos del hospital Gea González, según los cuales 85 por ciento de sus pacientes percibe menos de tres salarios mínimos; eso es vivir en pobreza extrema, subrayó, y en seguida se congratuló de que los médicos de ese nosocomio hubieran recalcado su convicción por practicar una medicina social y gratuita.
Y es que el hospital Gea González, como el resto de las instituciones públicas, atiende principalmente a personas de escasos recursos, pero enfrenta un serio problema de saturación; al año otorga 174 mil consultas médicas; registra una ocupación de 80 por ciento de sus camas censables; los doctores realizan 18 mil cirugías por año, y en el área de urgencias se atienden 52 mil pacientes en el mismo periodo.
Además, su capacidad está totalmente saturada, al menos así se informa a los pacientes desde la entrada del hospital. Un papel pegado en un cristal da cuenta de los servicios, principalmente cirugías, que ya no es posible realizar en lo que resta del año, y recomienda a los usuarios que se trasladen a otros nosocomios.
En esta realidad cotidiana -les dijo De la Fuente a los doctores reunidos en el auditorio del nosocomio- en la que ustedes viven todos los días, se desmenuzan las leyes del mercado. "Aquí es cuando vemos cuán distante está esa teoría, que a veces parece empeñarse en querer hacer rentable todas y cada una de las actividades de nuestro país.
"Hay instituciones públicas que no pueden renunciar a su carácter público y a su compromiso social, porque sería tanto como negar la historia, el desarrollo y la mejor de la tradición médica de nuestro país, de la cual muchos, todos, somos orgullosamente su producto", subrayó.
La intervención de Juan Ramón de la Fuente ocurrió al término de una sesión que se prolongó durante dos horas, en las que se expusieron las actividades clínicas más destacadas del hospital Gea González. En todo ese concepto de compromiso social, dijo el presidente de la ANM, hay un potencial extraordinario para seguir manteniendo la excelencia que ya se ha mostrado desde hace años en varias áreas.
Lo mismo ocurre en el ámbito de la investigación. También ahí se enfrenta una serie de dificultades, porque no hay las condiciones ni los recursos o el tiempo, e incluso por la carga asistencial que se tiene. A pesar de ello, la investigación va prosperando, señaló.
En entrevista posterior, el rector de la máxima casa de estudios mencionó que ante la carencia de recursos económicos, "lo más importante es resaltar el compromiso del Estado social en México, el compromiso con los programas sociales, con la salud, la educación y el combate a la pobreza en términos que vayan más allá de los discursos, que reflejen una voluntad, pero que deben traducirse en hechos y programas concretos".
-ƑActualmente existe ese compromiso social del Estado?
-Se tiene que traducir en hechos concretos. Es decir, en presupuestos que verdaderamente permitan que los programas avancen. De otra manera se queda -en el mejor de los casos- en esta retórica que no necesariamente contribuye a resolver los problemas.
-ƑDefinitivamente no cabe la posibilidad de que las instituciones públicas sean rentables?
-Se tiene que ver con mucha cautela, porque las instituciones de carácter público siguen siendo responsabilidad del Estado social mexicano y no son instituciones que estén diseñadas para ser rentables en términos económicos. Esto es aplicable a las universidades públicas, a los hospitales, a los programas públicos. Por eso son públicos, porque deben ser la expresión del compromiso social del Estado.
"A este tipo de programas no podemos pedirles ni debemos pretender que se conviertan en programas rentables, porque perderían esa función pública, solidaria, de atender a quienes no van a tener recursos para poder pagar por ellos", señaló De la Fuente.