Estados Unidos debe asumir su responsabilidad, afirma Francisco Székely
Exigirá México en la cumbre de Johannesburgo que naciones ratifiquen el Protocolo de Kyoto
Nuestro país tiene autoridad moral para demandar que otros gobiernos suscriban acuerdos en defensa del medio ambiente, asevera el subsecretario de la Semarnat
ANGELICA ENCISO L.
Con la ausencia del presidente estadunidense, George W. Bush, empieza hoy la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible de Johannesburgo, de la que deberán salir compromisos claros, si no será un fracaso. Ahí tendrán que refrendarse los principios de la Cumbre de Río de 1992, acerca de que el camino a la sustentabilidad es la única vía para preservar el medio ambiente, y de que todas las naciones tienen responsabilidades diferenciadas.
México defenderá el Protocolo de Kyoto sobre cambio climático, ya que encabeza los grupos de naciones vulnerables por este problema y el de países megadiversos afines cuyo objetivo es proteger la biodiversidad, explicó Francisco Székely, coordinador de la delegación mexicana y subsecretario de Planeación de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
En entrevista, el funcionario detalló la posición que México asumirá en la cumbre, después de que el año pasado se realizaron en el país 23 talleres de consulta para sacar nuestra posición en esta reunión internacional.
México sí cumple
Dijo que en aspectos globales la propuesta es que las naciones firmen los acuerdos multilaterales para la protección del medio ambiente y de los recursos naturales. "Hablamos con autoridad moral, porque nosotros sí los hemos ratificado. Está el caso del Protocolo de Kyoto y el de Cartagena -sobre biodiversidad-. Exigimos que los países detractores del medio ambiente participen y que Estados Unidos tome su responsabilidad planetaria y los ratifique. No hay discusión, pues ya sentimos el cambio climático."
Además, aseveró, ya hay un grupo de naciones que empieza a sentir el daño; México está entre éstas. "Hemos reunido al grupo de países vulnerables al cambio climático, entre los que están casi todos los africanos, México, Centroamérica, el Caribe y el sureste de Asia -India, Bangladesh y Filipinas-. Todas estas naciones sufrimos más, porque hay más tormentas tropicales y más incendios forestales."
Aquí, agregó, "tenemos dos ejemplos: el problema del Río Bravo, donde ya van 12 años de sequía. Esto no había ocurrido antes. Es una de las derivaciones del cambio climático. También está el récord de incendios -14 mil- en 1998. Por eso México buscó juntar a los países más vulnerables. Pedimos acciones especiales y compensación por los daños que ya ha habido y puede haber".
En cuanto a biodiversidad, Székely mencionó la iniciativa del grupo de países megadiversos afines, constituido por Bolivia, Brasil, China, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Filipinas, India, Indonesia, Kenia, México, Malasia, Perú, Sudáfrica y Venezuela. Estas 15 naciones tienen 70 por ciento de la biodiversidad del planeta y 45 por ciento de la población mundial.
Mencionó que el presidente Vicente Fox se reunirá con los jefes de Estado de las naciones de este grupo para tomar acuerdos sobre el combate a la biopiratería, porque "vienen las compañías trasnacionales, saquean los recursos, los patentan y no dejan beneficios locales".
Sostuvo que otra iniciativa del gobierno mexicano es establecer la relación entre la Cumbre de Monterrey y la de Johannesburgo. "En Monterrey se pidió a los países con mayores recursos que contribuyan más al desarrollo, a las necesidades de las naciones que menos tenemos, aunque no se habló de qué desarrollo, pero el planteamiento es que sea el desarrollo sustentable."
A escala nacional, la propuesta de la delegación mexicana es que los países deben incluir en sus políticas económicas la sustentabilidad, porque México ya lo está haciendo. "Todo lo que planteamos debe estar respaldado por lo que hacemos, pues de otra forma no tendríamos autoridad moral. Los gobiernos tienen que revisar sus políticas de salud, energía y agricultura. Aquí ya las estamos revisando y tendremos metas de desarrollo sustentable en cada rubro. Energía tiene nueve metas; una, que se presentará en la cumbre, es que 5 por ciento de la energía que aquí se consuma en 2010 sea renovable."
En relación con los organismos genéticamente modificados (OGM), el funcionario dijo que México ya ratificó el Protocolo de Cartagena y aún falta tener una ley de bioseguridad, además de que deben hacerse normas para el uso de transgénicos y analizar caso por caso los beneficios potenciales o los daños por la utilización de esos organismos.
"México no puede tomar una posición fundamentalista en este tema; es decir, que no entran o entren todos. Sería irresponsable. Lo responsable es decir sí y dónde, y viceversa, por eso se debe analizar caso por caso. Como la biotecnología es la gran industria, no podemos marginarnos de los beneficios. Se aplicará el principio precautorio. La ley ambiental vigente aplica este principio."
La declaración política aún no está terminada
En cuanto a la declaración política que saldrá de la reunión, aseveró que son dos páginas y aún no está terminada. "No cederemos en los principios de Río, que son fundamentales: la sustentabilidad como única forma de desarrollo, cambio climático -no lo vamos a negociar- y la responsabilidad común pero diferenciada. Todos somos responsables, pero unos más."
Hay gobiernos que van en la línea de México. "Es el caso de toda América Latina, donde los problemas son parecidos. Con Europa vamos juntos en cambio climático -todos ratificaron el Protocolo de Kyoto- y también en el tema del agua." En otros temas no hay coincidencia, como la iniciativa del Grupo de Países Megadiversos, que no gusta a la Unión Europea y a Estados Unidos "porque tienen presiones de sus industrias químicas".
Székely dijo que de la cumbre "deberán salir compromisos para el desarrollo sustentable, si no será un fracaso". El presidente de Estados Unidos no asistirá y en su lugar irá Collin Powell. "Va en una posición incómoda" por su rechazo a ratificar el Protocolo de Kyoto, que es en favor de la reducción del uso de combustibles fósiles, lo cual propicia el cambio climático. Ese país es el principal generador de emisiones. "No sólo México, sino todo el mundo los va a criticar", dijo finalmente.