No hay fondos para crear la infraestructura necesaria, dice el director del organismo
20 millones de mexicanos, sin perspectivas de contar con agua potable y alcantarillado: CNA
El funcionario reclama a la Cámara de Diputados dotar al sector de recursos adicionales
ANGELICA ENCISO L.
La Comisión Nacional del Agua (CNA) no cuenta con recursos para dotar de infraestructura de agua potable y alcantarillado a los 20 millones de personas que aún carecen del servicio; sólo puede mantener el abasto actual, sostuvo Cristóbal Jaime Jáquez, director del organismo.
Tan sólo para abasto de agua potable, la comisión requiere de 17 mil 500 millones de pesos, y este año su presupuesto "es insuficiente", pues apenas suma 9 mil millones, señaló en entrevista, e instó a la Cámara de Diputados a destinar más recursos al rubro.
Además de la falta de presupuesto, la CNA halló el año pasado que unos mil municipios adeudaban 72 mil millones de pesos por concepto de derechos y descargas de aguas residuales, dijo. Aunque la comisión condonó esa deuda para que a partir del primer trimestre de este año comenzaran a hacerse pagos regulares, sólo han cumplido 418 municipios, añadió.
El presupuesto de la CNA ha disminuido "no sólo en términos absolutos, en pesos corrientes, sino también en pesos constantes, de tal forma" que sólo cuenta con "9 mil millones de pesos".
Ello sólo permite realizar "acciones sustantivas para apoyar programas que tienen que ver con el uso del agua en la agricultura, en las zonas rurales y en las ciudades con 3 mil 500 millones de pesos, cifra que es totalmente insuficiente".
"No empeorar"
Señaló que las inversiones no son cuantiosas, aunque hay programas relacionados con la solución de temas relevantes, como la cobertura del servicio a la población y el aumento del nivel de abasto en la población rural. Asimismo se procura controlar las descargas industriales, tener acuíferos en equilibrio -que no se extraiga más de lo que se recarga-, fomentar la participación de los usuarios en el buen uso del agua y reducir riesgos de inundaciones y efectos de sequías.
"Lo que hacemos", agregó, "es medir la aplicación de los recursos, y con lo que en la actualidad existe se intenta mantener los indicadores que había a principios de año, con el propósito de no empeorar o disminuir el porcentaje de cobertura de agua potable para la población."
Agregó que la cobertura es de 80 por ciento de la población total, aunque de 24 millones de habitantes del medio rural se abastece a 68 por ciento, por lo que unos 8 millones no tienen agua y 16 millones carecen de alcantarillado.
En cuanto al tratamiento de aguas residuales, indicó que ha habido incremento, porque "recibimos un porcentaje de tratamiento de 21 por ciento y hemos crecido a 25 por ciento".
Agregó que con el gran proyecto de saneamiento de agua en la ciudad de México se llegará a 65 por ciento, que es la meta sexenal.
"Seguimos con la aspiración de que la Cámara de Diputados dé mayor presupuesto para resolver el problema que tenemos enfrente. La estimación es que requerimos 17 mil millones de pesos sólo para proyectos de agua potable."
La escasez de recursos, apuntó, daría como resultado continuar con infraestructura sin mantenimiento, deteriorada por el paso del tiempo, y se pondría en riesgo el abasto a zonas poblacionales.
Es necesario dar mantenimiento, aseveró, porque debido a las fugas hay pérdidas de alrededor de 40 por ciento de líquido.
Por ejemplo, dijo, por cada mil litros que maneja un organismo operador, sólo 600 llegan en forma efectiva a los usuarios, y el resto se pierde en las redes.
Pero de esos 600 litros, 10 por ciento son tomas irregulares, no controladas, y sólo queda 50 por ciento del agua del total que se distribuye, pero únicamente 30 por ciento se cobra.
Condonación de la deuda
Agregó que los organismos operadores tienen dificultades, no son autosuficientes desde el punto de vista operativo, técnico, administrativo ni financiero.
Los municipios y los organismos operadores acumularon en los pasados cinco años una deuda con el gobierno federal por concepto de derechos y por las descargas de aguas no tratadas por 72 mil millones de pesos.
Ante ello se firmaron los decretos de condonación, con el compromiso de que tendrían que empezar a pagar en forma regular a partir del primer trimestre del 2002. Por derechos se hizo el "borrón y cuenta nueva" y en descargas se les pidió que hicieran un programa a 48 meses para sanear las aguas que descargan.
Además, el pago que los municipios hagan por derechos les será devuelto, para que por cada peso aporten otro peso, y destinen esos recursos a la inversión en infraestructura.
Hasta ahora hay convenios de adhesión con 23 entidades, pero en el primer trimestre sólo pagaron sus derechos 418 municipios -que representan 55 por ciento del total del consumo de agua-, y el plazo para obtener este beneficio vence este 31 de julio.
El pago total que hicieron los municipios fue de 246 millones de pesos, que se les regresarán, y deberán invertir otra cantidad igual en la infraestructura. Así, hay una bolsa de casi 500 millones de pesos sólo en un trimestre y en el año podría haber una inversión en el sector de 2 mil millones de pesos, confió Jaime Jáquez.
Detección y reparación de fugas en la ciudad de México
El Distrito Federal, que es el principal usuario, pagó 70 millones de pesos, y en el año erogará unos 300 millones, que la Federación le regresará. De esa manera, cuando el gobierno de la ciudad aporte una cantidad igual, habrá 600 millones de pesos que se utilizarán para la detección y la reparación de fugas, así como para la sectorización de redes.
En el caso de las descargas, en el Distrito Federal existe el proyecto de Fideicomiso 1928, tendiente a destinar recursos a drenaje y saneamiento de aguas con la construcción de cuatro plantas de tratamiento. Hasta ahora se sanea sólo 25 por ciento de las aguas que se descargan, lo cual ocasiona problemas de contaminación, sostuvo el funcionario.