Los jugadores no entienden que la situación cambió: García
Sin contrato, 70% de los atlantistas
El futbol mexicano todavía es un paraíso, consideró
el dirigente
ABRIL DEL RIO
José Antonio García, presidente del club
Atlante, admitió que a dos semanas de iniciar el Torneo de Apertura
2002, la directiva tiene pendientes los arreglos con 70 por ciento del
plantel, situación que consideró "normal, el estira y afloja,
porque muchas veces los jugadores no entienden que cambió la situación
y que ya no se pueden pagar altos sueldos". No obstante, aseguró
que el futbol mexicano todavía "es un paraíso, uno de los
mejores pagados, creo que sigue siendo el cuarto o quinto a escala mundial.
"Los
patrocinadores ya no aportan grandes cantidades, cada vez son más
difíciles, entonces tiene que ser una situación que debe
ir acorde al debe y al haber", apuntó García, quien sostuvo
que la semana entrante se dedicará a firmar a los pendientes.
Por lo pronto, confirmó la permanencia del chileno
Fabián Estay en el equipo, aunque dio a entender que esa recontratación
ocasionará bajas de dos extranjeros, y supuso que eso sucederá
en el medio campo, área en la que se desempeñan los colombianos
Víctor Pacheco y Manuel Galarizo.
La decisión, subrayó, será tomada
en exclusiva por el técnico Miguel Herrera, quien solicitó
a Estay, y que debía aprovechar el encuentro que anoche sostendrían
los Potros ante Palestino de Chile, para observar el desempeño de
los colombianos y decidirse por uno de los dos.
Respecto a la nueva sede del equipo, el estadio Neza 86,
García manifestó que el club trabaja en estrategias para
allegarse aficionados. De inicio, los precios de las entradas serán
de entre 60 y 100 pesos, cifras que habrán de aumentar en los partidos
frente a América, Cruz Azul o Guadalajara, aunque habrá promociones
para los "seguidores de siempre" que guarden sus boletos.
Por su parte, Enrique de la Garza, titular de la Primera
División A, externó que el Torneo de Invierno 2002 podría
realizarse con 18 o 19 equipos, si es que Gavilanes de Monterrey y Monarcas
de Zitácuaro no definen sus sedes cuando el lunes se cumpla el plazo
fijado. Los neoleoneses, antes Toros Neza, deberán contar con la
anuencia de equipos de la zona si insisten en jugar en Guadalupe, mientras
que Zitácuaro, que cambiaría de nombre y pretende militar
en la zona metropolitana, deberá hacer una nueva propuesta de estadio.