Rechazan la propuesta final de la empresa; "no dejaremos la planta de El Salto", dicen

Advierten obreros de Euzkadi que continuarán en lucha

Responsabilizan al titular del Trabajo, Carlos Abascal, de cualquier intento de represión

FABIOLA MARTINEZ

Los trabajadores de la llantera Euzkadi advirtieron que no se retirarán de la planta ubicada en El Salto, Jalisco, hasta obtener un finiquito mayor al que ofreció esta empresa en calidad de "propuesta final y definitiva", por lo que no existe la posibilidad de que concluya este conflicto en el corto plazo.

Aun con la advertencia de que podrían ser desalojados con el uso de la fuerza pública, el sindicato acordó no desistir.

"Definitivamente no nos iremos de la fábrica, pase lo que pase", señaló el dirigente del Sindicato Nacional Revolucionario de Trabajadores de Euzkadi, Jesús Torres Nuño.

De acuerdo con información del sindicato, la cual coincide con lo expresado por el abogado de la empresa, Jorge de Regil, de una plantilla de mil 164 trabajadores, cerca de 100 obreros ya aceptaron su liquidación, aunque el grueso de empleados afirma que continuará en esta lucha hasta obtener una indemnización mayor, e incluso hacen responsable al secretario del Trabajo y Previsión Social, Carlos Abascal, "de cualquier tipo de represión ordenada por su amigo De Regil".

El último ofrecimiento

En lo que denomina "propuesta final y definitiva", la empresa ofrece incrementar en 3 por ciento (respecto al monto que actualmente está depositado en la Junta Federal de Conciliación y Arbirtraje para fines de liquidación) las indemnizaciones de todos los "ex trabajadores", y ofrece por concepto de terminación de contrato el equivalente a 24 meses de cuotas sindicales, aproximadamente 3 millones 900 mil pesos.

El conflicto de Euzkadi no tiene visos de solución en los próximos días, ya que el sindicato exige por terminación del contrato colectivo 300 millones de pesos, bajo el argumento de que con esa cantidad se cubrirían salarios caídos (cerca de 70 millones de pesos) y la parte proporcional de pagos por casi siete meses de aguinaldo, prima de antigüedad, cuotas del IMSS, SAR, Infonavit, transporte, entre otros rubros.

La empresa ofrece 30 por ciento adicional a 10 obreros especializados, 12 trabajadores con incapacidad parcial permanente, dos ex empleados incapacitados y ocho trabajadores con comisión sindical.

Sin embargo, esta propuesta no convence a la directiva sindical de Euzkadi, la cual ha intensificado su gestión por medio de cartas enviadas a organismos internacionales, como la FIAN (organización no gubernamental de derechos humanos con estatus consultivo ante las Naciones Unidas, con sede en Alemania), y al presidente Vicente Fox.

De igual forma empezaron el "volanteo" del caso entre los obreros de Continental, con el objetivo de presionar para obtener "una indemnización adicional como medida de compensación por actos violatorios a los derechos laborales".

Una comisión de obreros viajó a la planta de General Tire en San Luis Potosí, también subsidiaria de la trasnacional Continental Tire, al tiempo que continúan sus gestiones con organizaciones sociales y sindicales de México y Europa.

Ayer por la mañana acudieron al juzgado tercero de distrito en materia de trabajo en el Distrito Federal, donde se realizó la audiencia constitucional del amparo que interpuso Euzkadi tras la declaratoria de "improcedencia" de la huelga que encabezan "de hecho" en la llantera.

El próximo lunes el juzgado emitirá su dictamen que, de resultar satisfactorio para los trabajadores, obligaría a la Junta Federal Conciliación y Arbitraje a calificar nuevamente el movimiento de huelga.

Los alegatos que presentó el sindicato se sustentan en que la empresa suspendió labores ilegalmente, al no haber solicitado a la junta la autorización para ejecutar el cierre, y tampoco, afirman los trabajadores, se sometió a las reglas que en materia de huelga establece la Ley Federal del Trabajo.

Recuento del movimiento

17 de diciembre de 2001: La empresa decide cerrar la planta ubicada en El Salto, Jalisco.

10 de enero de 2002: El sindicato emplaza a huelga.

22 de enero: Estalla la huelga.

22 de marzo: La Junta Federal de Conciliación y Arbitraje declara "improcedente" la huelga.

28 de junio: La empresa presenta su propuesta "final", pero sólo 96 obreros aceptan su liquidación.

5 de julio: Audiencia sobre el amparo de "improcedencia" de la huelga.