Tantos incidentes pueden destruir la confianza, consideran

Exigen afganos a Washington el fin de las matanzas de civiles

REUTERS, AFP, PL Y DPA

Kabul, 4 de julio. Unos cien afganos, en su mayoría mujeres, protestaron hoy en esta capital contra el ataque aéreo del domingo por la noche de Estados Unidos contra un remoto poblado en la provincia de Uruzgan, y exigieron el fin de las matanzas de civiles y una compensación para las víctimas y familiares afectados.

Se estima que entre 100 y 200 personas se apostaron en esta capital ante la Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Afganistán (UNAMA), organizadas por la recientemente creada Coalición Frente para la Unidad y la Democracia, en repudio al bombardeo sobre la aldea de Deh Rawud, donde se celebraba una boda.

"Condenamos el terrorismo. No estamos contra los estadunidenses, pero eso no significa que ellos deben dejar caer bombas sobre los residentes, en ceremonias alegres y santuarios en vez de sobre los blancos militares", señalaron grupos de mujeres en volantes distribuidos a la prensa.

Puntualizaron que apoyan el combate para erradicar a núcleos de resistencia del derrocado régimen talibán y de la red Al Qaeda, liderada por Osama Bin Laden, pero poniendo fin a la muerte de civiles. Indicaron que Estados Unidos debe comunicar a sus oficiales que este tipo de incidentes pueden destruir las relaciones y la confianza entre ambos países.

Sin embargo, la misión estadunidense que acudió al lugar de los hechos sólo pudo obtener muestras de sangre, ya que no lograba convencer a las autoridades locales de que le permitieran ver los cadáveres, que oficialmente serían 40, y un centenar de heridos.

El vocero de la coalición occidental, Roger King, dijo que negociaban con las autoridades locales para verificar los cuerpos de las víctimas, pues éstos fueron enterrados desde el lunes acorde con la rapidez que imponen sus creencias religiosas.

El gobernador de Uruzgan, Jan Mohammad, acusó a "informantes" de haber proporcionado datos falsos a las fuerzas de Estados Unidos para lanzar el ataque, como ha sucedido en otras ocasiones. Por tanto, pidió a las autoridades afganas y estadunidenses la entrega de esos "espías" a su gobierno.