Finaliza Dina proceso de liquidación del ramo camiones

Se conjura huelga de mineros en Hidalgo; aceptan aumento de 5.5%

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Pachuca, Hgo., 17 de junio. Los 500 mineros de la Compañía Real del Monte y Pachuca (CRMP) aceptaron un aumento salarial de 5.5 por ciento directo al tabulador y a otras prestaciones, con lo que quedó conjurada la huelga programada para el mediodía de este martes por los Trabajadores Mineros Metalúrgicos Similares y Conexos de la República Mexicana.

En sendas asambleas, realizadas en Pachuca y Real del Monte, Hidalgo, se aceptó la propuesta final de la empresa que incluye, además del 5.5 por ciento de alza al salario, un día más de aguinaldo, para completar 21 días; un día más en vacaciones, 34 por ciento en incremento a la prima dominical, cuatro becas de cien pesos mensuales por cada sección sindical, así como un bono de despensa en diciembre de 715 pesos para la categoría A, y de 630 pesos para la B. También se logró la revisión de las tablas de bonos a trabajadores por destajo en lapsos de 80 días. Lo anterior será cubierto -con carácter retroactivo al 22 de enero de 2002- a los 500 trabajadores de las secciones 2 y 3 de Pachuca y Real del Monte.

En otro orden, la empresa Diesel Nacional (Dina) concluyó el proceso de liquidación de su planta Dina-Camiones, con la entrega de 155 millones de pesos por concepto de indemnización de sus 506 trabajadores y lo correspondiente al contrato colectivo de trabajo.

Ahora, el Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz (SNITIA), espera que se concrete alguna de las 24 cartas de intención de posibles inversionistas, que tengan la intención de reactivar la planta que operó durante 30 años en la región y llegó a su esplendor en la década de los 70.

Textilera cambia de razón social y deja sin empleo a 200 obreras

Por otra parte, la empresa textil Sekie, asentada desde hace 20 años en el corredor industrial de Tepeji del Río, cambió de razón social y con ello canceló el contrato colectivo de trabajo y dejó sin empleo a 200 obreras, que acusan violaciones a ley y a sus condiciones generales de trabajo.

Arturo Ortega, administrador de la empresa, notificó sobre esta decisión a Mariana Santos Gutiérrez, secretaria general del sindicato obrero, dependiente de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) que controla 95 por ciento de los contratos de las cerca de cinco mil empresas que emplean a más de 20 mil obreros de la región.

Este lunes, a las cinco de la mañana, cuando comienza el primer turno, los trabajadores se encontraron con que la empresa Sekie, que durante dos décadas llevó ese nombre, había cambiado a Alaia, y de paso aniquilaba al sindicato, por lo que dejaba sin posibilidades de negociar una liquidación justa a sus más de 200 obreros, 90 por ciento de ellos mujeres y una buena parte, mayores de 40 años.