La "huelga trabajando" no es una vacilada: SNTE

PATRICIA MUÑOZ RIOS

El secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Rafael Ochoa Guzmán, anunció el inicio de la "huelga trabajando" que llevarán a cabo los maestros afiliados a esa organización, y dijo que se trata de un movimiento "a la japonesa", que no es una vacilada sino una actitud responsable de lucha, pues seguirán laborando y sólo portarán listones en el brazo en señal de protesta, los cuales serán de colores negro y rojo con la leyenda: "Sin parar, nuestras demandas marchan".

En la presentación de esta forma de protesta, el líder expuso que el magisterio no está inventando "el agua tibia", pues hay diferentes formas de hacer huelgas: "unas son de hambre, otras son parando labores, la de nosotros será trabajando".

A nadie se le obligará a participar en esta huelga, pero se estima que la mayoría de los 900 mil profesores de educación básica en el país portarán a partir de esta semana su listón de huelga, con el que muestran su rechazo al insuficiente incremento salarial de 11 por ciento que se dio al magisterio, el cual se aceptó "bajo protesta", según planteó el dirigente.

"La huelga trabajando, a diferencia de las manifestaciones clásicas de inconformidad, se caracteriza por ser una protesta responsable, pues la hacemos sin lastimar a terceros, sin incumplir con las obligaciones laborales, respetando el calendario escolar y reafirmando nuestra indeclinable voluntad de luchar por mejores condiciones profesionales, laborales y de vida, sin desatender el compromiso fundamental, la tarea de educar", señaló.

Consideró válido ese recurso de protesta porque este año se redujeron en 38 por ciento los recursos destinados a la educación respecto de los que se le otorgaron en el año fiscal inmediato anterior, y los maestros, debido a sus reducidos salarios, en lugar de estar concentrados en preocupaciones educativas, muchos de ellos "tienen que complementar su salario lavando carros, manejando un taxi, en trabajo de la construcción, en diversas áreas", por lo que se precisa de hacer esfuerzos serios en materia presupuestal para el sector.

Se le preguntó si esta "huelga trabajando" no es una "vacilada", a lo que respondió que más allá de los epítetos y adjetivos con los que se quiera bautizar esta protesta, el SNTE está convencido de que "servirá de mucho" si se lleva a cabo con convicción, pues si ha funcionado en otras partes del mundo, también lo hará en México. "Las huelgas pueden tener todas las variantes, se trata sólo de ponerle imaginación, disposición de cómo impulsar una nueva cultura de la participación y hacer públicas nuestras manifestaciones e inconformidades".

En su opinión, con esta movilización "igual podemos hacer sentir nuestro repudio, reclamo y rechazo a determinados comportamientos o políticas aplicadas, sin lesionar lo más valioso que tiene nuestro país: los niños". El SNTE lo que busca, apuntó, es reivindicar la negociación, la mesa de diálogo para encontrar solución a los planteamientos en cada entidad federativa.

Ochoa Guzmán aseguró que con esta forma de lucha, el magisterio "no se está poniendo el signo de pesos en la frente", porque no se busca sólo la mejoría salarial, sino del servicio educativo del país; además, la decisión de la huelga partió del órgano superior de gobierno del comité ejecutivo nacional y abarca la invitación a todos los trabajadores del sector en el país.

El dirigente comentó que pese a las críticas, se cree que esta huelga es el primer paso para lograr un gran acuerdo, un pacto social por la calidad de la educación pública que involucre a todos los sectores sociales de México.

La huelga se inició ayer, concluye el último día del presente ciclo lectivo y no tiene el objetivo de que mañana o pasado le den algo adicional de recursos, sino poner la educación pública en el centro del debate nacional. "Si el Legislativo cumple para que el Ejecutivo no pueda aplicar de manera indiscriminada, arbitraria e insensible recortes presupuestales a las áreas fundamentales de salud y educación, nos podríamos dar por bien servidos", apuntó el dirigente del SNTE.