Con David Beckham a la cabeza, el cuadro de
la rosa será protagonista en la Copa
El sueco Ericksson resucitó al futbol de Inglaterra
El seleccionador, auténtico héroe nacional
Michael Owen, un goleador de sangre fría
AFP
El alicaído futbol inglés resucitó
en los dos últimos meses gracias a un enigmático, parco en
palabras y brillante seleccionador llamado Sven-Goran Ericksson. El sueco
llegó cuando el futbol insular tocaba fondo. Doce meses después,
la suerte del equipo cambió completamente e Inglaterra, con David
Beckham a la cabeza, se convirtió en una selección a tener
en cuenta en Corea y Japón.
Después
de perder 1-0 contra Alemania en las eliminatorias mundialistas en su histórico
estadio de Wembley, la moral de los jugadores estaba por los suelos. El
anuncio de la dimisión de Kevin Keegan después del encuentro
acabó de hundirlos.
Era el despertar a una triste realidad que la hinchada
se negaba a ver, sumida en los recuerdos de un glorioso pasado.
Al marcharse Keegan -el último de una serie de
bien intencionados, pero inadecuados entrenadores- la federación
inglesa tomó en octubre de 2000 una medida revolucionaria, contratar
a un extranjero como seleccionador, el sueco Ericksson.
La decisión fue un éxito. Cuando todos los
ingleses pensaban que su selección tendría que jugarse la
clasificación en la repesca, el equipo logró una remontada
espectacular.
Ericksson supo trasmitir sentido de la responsabilidad,
seriedad y confianza a un equipo urgido de esas virtudes.
Los resultados se notaron rápidamente. En el partido
del desquite contra Alemania en Munich, los ingleses se vengaron con un
majestuoso 5-1.
Luego de otra victoria frente a Albania y un empate contra
Grecia, Inglaterra no sólo no estaba eliminada, sino que había
logrado salir del pozo de los últimos puestos con la cabeza bien
alta.
Ericksson contó para ello con jugadores de la talla
de David Beckham (Manchester United) y Michel Owen (Liverpool), Jamie Carragher
(Liverpool), Sol Campbell (Arsenal), Paul Sholes (Manchester United) y
Emile Heskey (Liverpool).
Sven-Goran Ericksson
El seleccionador de Inglaterra, Sven-Goran Ericksson,
hizo callar a los escépticos, y condujo al equipo desde el último
lugar de las clasificaciones a contar con un lugar de privilegio en el
Mundial Corea-Japón.
Su contratación, en octubre de 2000, levantó
muchas ampollas en Inglaterra, especialmente por el hecho de ser extranjero.
Pero el sueco empezó, tranquilamente, a rehacer
el equipo. Como base, las estrellas David Beckham, Michel Owen y Paul Scholes.
También le dio la oportunidad de entrar a otros jugadores como Steven
Gerrard y Ashley Cole.
Una serie de victorias consecutivas frente a Finlandia,
Albania y Grecia le devolvieron a Inglaterra las esperanzas. Así
que acudieron a su encuentro con Alemania llenos de confianza.
"Creo que la suerte está de nuestra parte", pronosticó
Ericksson justo antes del partido. Después de que Inglaterra "masacrara"
a sus viejos rivales en el estadio Olímpico (1-5), el sueco, de
53 años, fue elevado a la categoría de héroe nacional.
Michael Owen
Sólo
tendrá 22 años cuando empiece el Mundial, pero su nombre
ya figura con letras de oro en el equipo de Inglaterra. Su sangre fría
y su eficacia en el área han convertido a este menudo atacante (1.70
metros) en uno de los mejores goleadores del momento.
Fue, con 18 años y 59 días, el jugador más
joven en llevar la camiseta de la selección en un partido contra
Chile en febrero de 1998. Algunos meses después, en el Mundial de
Francia, todo el mundo hablaba de él gracias a un gol majestuoso
contra Argentina.
El seleccionador de Inglaterra, es consciente de que Owen
es un goleador capaz de ganar el sólo un partido. Cuando lo describe
como alguien "frío", no se refiere al carácter de este chico
tímido y reservado, sino a su implacable eficacia en su papel de
"matador" en el área chica.
Inglaterra
Copa del Mundo: 10 participaciones (1950, 1954,
1958, 1962, 1966, 1970, 1982, 1986, 1990, 1998).
Palmarés: Vencedor en 1966 (en Inglaterra),
semifinalista (1990).
Eurocopa: Semifinalista (1968, 1996)