El diputado panista Federico Doring ha pretendido negociar en favor de particulares, dice
Denuncia López Obrador intentos de chantajear a su administración
Acusa a la priísta González Gamio de condicionar aprobación de uso de suelo para escuela
ELIA BALTAZAR
El diputado local panista Federico Doring ha pretendido "negociar" con autoridades capitalinas para obtener beneficios en favor de particulares, a cambio de "bajarle" a sus cuestionamientos hacia la administración local, reveló ayer el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, quien también acusó a la legisladora priísta Margarita González Gamio de condicionar su aprobación a un cambio de uso de suelo para construir una preparatoria en Magdalena Contreras.
"No vamos a permitir chantajes de ningún tipo", advirtió, y aun mandó "al diablo" a quienes pretenden "llegar a acuerdos" con el gobierno capitalino para sacar provecho a sus gestiones personales. "Que se vayan a buscar negociaciones a otra parte, y que sepan de una vez que aquí no hay posibilidad de nada más que aquello que se da en el marco de la legalidad", dijo.
Si antes ya había señalado los intereses del senador panista Fauzi Hamdan con la empresa Eumex, a la cual representa legalmente aun cuando esta firma enfrenta una demanda del gobierno capitalino, ahora tocó el turno a Federico Doring, quien "ha gestionado" ante las autoridades en favor de un particular por una demanda penal en la que hay de por medio 4 millones de dólares por honorarios, informó López Obrador.
Doring habló primero con la secretaria de Turismo, Julieta Campos, y con el subsecretario de Gobierno, Alejandro Encinas; luego, con el procurador capitalino, Bernardo Bátiz, para que la institución a cargo de este último fallara en favor de su representado, explicó el jefe de Gobierno. El diputado dijo incluso que si no se resolvía este asunto seguiría con sus cuestionamientos hacia las autoridades locales.
López Obrador, sin embargo, aclaró que esta amenaza no le consta, pues Doring no habló con él directamente. Porque si lo hubiera hecho, "lo mando al diablo". Pero no hay duda de que ha llevado a cabo estas gestiones, afirmó. Y así lo ratificó el subsecretario de Gobierno del DF, Alejandro Encinas, quien explicó: "Doring vino con otros dos diputados, el 2 y el 16 de abril pasados, para hacer gestión en favor de la familia Kurián, involucrada en un litigio civil y una demanda penal".
Encinas explicó que el gobierno capitalino intervino en primera instancia en la controversia que involucra a dos familias de la comunidad judía, para mediar entre las partes y que el problema se solucionara de común acuerdo. Pero no se logró.
Ya hay una demanda penal por este caso y será la procuraduría la que tendrá que resolver sin ninguna presión, contra lo que pretende Doring, quien ha ofrecido a cambio "bajarle a sus ataques al gobierno capitalino".
López Obrador, por su parte, aseguró: "Nos tiene sin cuidado lo que haga, pero no se puede actuar con una máscara de honorabilidad cuando lo único que hay es hipocresía, al decir que son hombres de bien, decentes".
Mejor "que se dediquen a legislar y que dejen sus negocios en manos de otra gente. O que no utilicen influencias para sacar provecho personal". Porque de otra forma, aseguró, se incurre en influyentismo. Y "de ahí son muchas de nuestras diferencias, pues pensaban que podían seguir arreglando todo con el telefonazo de parte del diputado o del senador, y eso ya se acabó".
De paso, y aunque no abordó el tema de manera particular, el jefe de Gobierno advirtió también sobre los intereses creados a partir de las donaciones en campañas políticas. "No quiero referirme a nada en particular, pero si empresarios y banqueros dan dinero a los candidatos, cuando éstos llegan al cargo están atados de pies y manos. Y si esos son los patrones, Ƒen dónde está el interés general?"
"Actitudes mezquinas"
El jefe de Gobierno también cuestionó la actitud de la diputada local priísta Margarita González Gamio, presidenta de la Comisión de Desarrollo Urbano, a quien puso como ejemplo de cuando se pretende condicionar las acciones de gobierno.
Expresó: "Hace ya ocho meses que presentamos a la Asamblea Legislativa una solicitud de cambio de uso de suelo para construir una preparatoria en Magdalena Contreras. Y no se autoriza porque la diputada del PRI, que tiene a su cargo este asunto, no quiere".
Afirmó que González Gamio pretende negociar: "Se autoriza esto, pero primero a ver cuántos cambios de uso de suelo va a aceptar el gobierno".
Lo mismo, agregó López Obrador, ocurre en el Senado con la reforma política para el Distrito Federal. "Hay una actitud mezquina que nada tiene que ver con el interés de la gente y lo que conviene a la ciudad".
Ocurre, explicó, que los senadores de PRI y PAN dicen que la aprobación de la reforma beneficiaría al jefe de Gobierno, cuando "lo único que hicimos fue facilitar el diálogo para que los partidos llegaran a un acuerdo". Pero "no puede uno plantear nada porque lo frenan por la situación partidista, como está frenada la reforma política en el Senado".
-ƑEn la reforma política hay chantaje? -se le preguntó.
-No sé cómo llamarlo. Pero sí hay una actitud poco profesional en algunos asuntos que tocan al Poder Legislativo. Porque no es posible que si hay un consenso de todas las fuerzas políticas de la ciudad para la reforma de la Constitución, y aun se aprobó el dictamen en la Cámara de Diputados, se atore ahora en el Senado.
En este tema, dijo, ya "empezó la politiquería", pues los diputados panistas que antes votaron en la Asamblea Legislativa en favor de la reforma política para el DF, ya "se retractaron por intereses partidistas y hacen grupo con senadores del PRI para bloquearla".
Frente a la condición impuesta por el Senado para que sea el Ejecutivo local y no el secretario de Gobierno, José Agustín Ortiz Pinchetti, quien comparezca respecto de la reforma, López Obrador dijo: "Voy si es obligatorio, pero, Ƒa qué?"
Recomendó a los senadores, en cambio, "levantar la mira y el nivel del debate", porque "no es posible que actúen de esta manera, pues así no se va a poder avanzar".
En todos estos temas, "no vamos a negociar una cosa por otra, no le vamos a entrar a la negociación y vamos a defender siempre nuestra postura".
Por último, el jefe de Gobierno informó que el próximo martes se reunirá con el director del IMSS, Santiago Levy, para abordar el tema del adeudo de 3 mil 500 millones de pesos por la falta de pago del impuesto de 2 por ciento sobre nómina.
"Es mucho para una escuela"
Al respecto Margarita González Gamio, presidenta de la Comisión de Desarrollo Urbano y Reservas Territoriales de la ALDF, exigió al mandatario local probar que ella tiene interés particular en ciertos cambios de uso de suelo. "Si no me prueba con papeles cuál o cuáles son los usos que quiero, lo demando".
Molesta, la legisladora priísta puntualizó que en los últimos 18 meses se han recibido 30 modificaciones al uso de suelo y programas parciales, de los cuales 20 son herencia de la administración de Rosario Robles y los restantes 10 de López Obrador.
"De estos últimos, siete correspondieron a terrenos para las preparatorias, una para la Plaza Mariana y otra para la Plaza de la Conchita (Coyoacán)".
González Gamio denunció que López Obrador sólo ha enviado a la asamblea lo que a él le interesa, mientras que tiene bloqueadas 574 solicitudes de cambios de uso de suelo hechas por los ciudadanos.
Precisó que para la preparatoria el GDF está solicitando el cambio de uso de suelo de más de 60 mil metros cuadrados. "Eso es mucho para una escuela, y además pide que sea HM, el cual puede ser para escuelas, pero también para oficinas, bares, discotecas, etcétera".