Enrique Calderón Alzati

Insulto a Cuba, agravio a México

Si bien Fox y algunos de sus colaboradores cercanos nos han dado ya innumerables muestras de su falta de sentido común y de su desconocimiento de la historia, ningún error ha sido tan grave como el ocurrido en los días pasados en relación con su trato con la República de Cuba y con su presidente, el comandante Fidel Castro.

Somos muchos los mexicanos que recordamos con admiración y cariño las hazañas de Fidel y Raúl Castro, del Che Guevara y de aquel ejército popular comandado por ellos para liberar a Cuba de una de las dictaduras más sanguinarias y corruptas de que se tenga memoria en el continente americano, y somos aún más los que sabemos de las heroicas luchas del gobierno cubano, indiscutiblemente apoyado por su pueblo, para resistir las tropelías y crímenes intentados infructuosamente en su contra por el gobierno de Estados Unidos. Pese al bloqueo económico que Washington ha sostenido por décadas contra la isla sin doblegarla, sus programas de educación, de salud, de vivienda y de desarrollo agrícola son ampliamente conocidos y constituyen esfuerzos ejemplares e inéditos.

Su lucha desigual contra el gigante y las proezas sociales que en medio de tanta presión ha conseguido el pueblo cubano, han hecho de su líder una de las más grandes personalidades mundiales del siglo xx, y Cuba se ha ganado el reconocimiento por su trabajo y por sus logros que la colocan en diversos campos como la nación más avanzada de Latinoamérica, posibles en buena medida por el liderazgo de Castro

Pero si Fidel Castro tiene admiradores en todo el mundo, los tiene especialmente en México, donde conocemos de cerca el significado de su lucha. ƑCuántas veces hemos hablado en nuestro país de la necesidad de contar con un líder de la talla de Fidel, en lugar de los obscuros, grises y a veces patéticos gobernantes que hemos tenido que sufrir?

Por ello, las actitudes de arrogancia, las mentiras y las maniobras serviles del presidente Fox, además de constituir una grave ofensa a una de las naciones más queridas de la nuestra, ha ofendido y lastimado al pueblo de México o al menos a una buena parte de éste. Al denostar al presidente de Cuba, el secretario Castañeda poco servicio le hace a nuestro país y la insolencia de sus declaraciones lo colocan a su altura real, la de un mamarracho.

Cuba ha vivido días y años en condiciones de excepción, sitiada y vigilada por la potencia más poderosa y belicosa del planeta, negados sus derechos como nación soberana, víctima de acciones terroristas, que incluyen atentados a aviones y vías de comunicación, además de un ataque propagandístico de muchas décadas desde Miami. En tales condiciones, la disidencia que siempre existe porque cada ser humano tiene capacidad para pensar en forma distinta, no puede ser permitida sin restricciones, bajo riesgo de convertirse fácilmente en instrumento de inestabilidad y penetración externa.

Este hecho lo saben, lo sabemos todos y cuando México dio su voto condenatorio al gobierno de Cuba lo hizo por otras razones totalmente alejadas de la ética.

El gobierno de Fox demanda unidad en torno a sus acciones y convicciones que por ningún motivo pueden ser las nuestras, y establece un falso dilema, al plantear que debemos estar con Estados Unidos y no con Cuba, haciendo suyo un conflicto que es sólo de Estados Unidos y esto porque ellos así lo quieren. De todo este enredo el gobierno de Fox ha salido lastimado y debilitado aunque no lo quiera ver así, su credibilidad menguada y anuladas las pocas dudas que existían sobre los intereses que representa y defiende.