Falta de un estado de derecho, entre las causa, señala

En dos décadas la ciudad de México se volvió más violenta: Coparmex-DF

LAURA GOMEZ FLORES

En las últimas dos décadas la ciudad de México se ha vuelto más violenta e insegura por la falta de un estado de derecho, la incapacidad de las autoridades para combatir la inseguridad, las bajas penas con que se castigan muchos delitos, la carencia de una cultura de denuncia y la facilidad con que operan los delincuentes.

Lo anterior señaló el presidente saliente de la Coparmex-DF, Sergio Peralta Sandoval, quien agregó que el aumento de la criminalidad es producto del carácter reactivo de las instituciones de seguridad y justicia y de su distanciamiento de la sociedad, cuyos resultados son ineficacia, corrupción y crecimiento de la cultura del delito, dado que sólo uno de cada cinco hechos ilícitos se denuncian y 90 por ciento de los denunciados se mantienen en la impunidad.

Sus consecuencias se reflejarán en el aumento del costo-país; la baja de inversiones, empleos, visitantes y captación de ingresos; por eso la urgencia de atacar la inseguridad, pues "postergarla o hacerlo mal significaría enviar un mensaje negativo a la comunidad internacional que tiene los ojos puestos en nuestro país", dijo durante la séptima asamblea de la Coparmex-DF, en la cual se eligió a Carlos Cendejas como su nuevo presidente.

Ante el secretario de Gobierno capitalino, José Agustín Ortiz Pinchetti, afirmó que "si en algún rubro se enciende la luz roja es en el de la seguridad pública, pues constituye el principal problema que sufrimos los capitalinos y demanda soluciones a fondo, para frenar el crecimiento de la industria delictiva organizada, cuyo rasgo más preocupante es el grado extremo de violencia que los delincuentes infligen a sus víctimas".

Por ello, el uso ciudadano de mecanismos preventivos del delito, como el cierre de calles y la contratación de vigilancia privada, debería respetarse y normarse, pero no promoverse en tanto las autoridades civiles no estén en capacidad de garantizar la seguridad de los ciudadanos, dijo.

Insistió en la importancia que tendría el conocimiento del número real de delitos cometidos en la ciudad mediante una encuesta de victimización elaborada con el apoyo de la ONU, y realizarla de manera cíclica para "acabar con el manido argumento de que se ha logrado reducir el número de crímenes, sólo que ha aumentado la cantidad de denunciados o viceversa".

Hasta el momento, mencionó el presidente entrante de la Coparmex, Carlos Cendejas, las 17 acciones de seguridad pública para erradicar la delincuencia no han dado resultado, pues ésta va ganando terreno y una prueba es que el año pasado, de 100 mil robos reportados, sólo en 9 mil se ejerció acción penal.

José Agustín Ortiz Pinchetti dijo que no es fácil reconocer los avances en la materia por la herencia nefasta de corrupción dejada por las regencias, pero no será resuelta si el país no crece y seguimos sumidos en una decadencia económica, en una crisis; por eso el interés de esta administración de atacar el problema de fondo con la generación de empleos y diversas alternativas laborales.