Pacheco y Martínez superaron a Platas y Pérez
Me voy para demostrar quién es el mejor en clavados: Francisco Rueda
ROSALIA A. VILLANUEVA
La juventud de Rommel Pacheco y Jorge Martínez prevaleció sobre la experiencia de Fernando Platas y Francisco Pérez al ganar la prueba de plataforma sincronizados en el último día del selectivo clavados, en el que la pareja ganadora y sus compañeras Laura Sánchez y Paola Espinoza, vencedoras en la rama femenil, se despidieron de la alberca del CDOM, para continuar los entrenamientos en su nueva residencia en Monterrey, Nuevo León, al lado de su entrenador Francisco Rueda.
Orgulloso del resultado de sus pupilos que demostraron la buena racha que pasan tras la exitosa gira europea, en la que ganaron 12 medallas (seis oros y seis platas), el técnico subrayó que no hay mejor recompensa que la clasificación de todos sus alumnos, la mayoría juveniles, a los torneos Canamex.
Rueda no ocultó su felicidad cuando Pacheco y Martínez (289.32) derrotaron nada menos que al favorito Platas (276.54), con su nueva pareja Pérez, quien ocupó el lugar del lesionado Eduardo Rueda, alumnos del entrenador nacional de clavados, Jorge, su hermano mayor. En damas, el segundo sitio fue para Karina Osorno y Abril López (UNAM).
"Este trabajo es de equipo, no es una casualidad ni tampoco nos apoyamos con un clavadista. Mi salida no se debe a que me forzaron o me obligaron. Me voy con mis alumnos (a Monterrey), porque me ofrecieron la oportunidad de llevar a cabo el proyecto juvenil de Atenas 2004.
"Tengo el respaldo de Víctor Ramos, director del Instituto del Deporte de Nuevo León y de los padres de familia que me depositaron la confianza de seguir entrenando a sus hijos. Tendrán estudios, becas, hospedaje, alimentación y alberca, y estaré con mi familia'', aseguró el técnico, quien de paso negó que se vaya por la reciente contratación del ruso Pijakov Stanislav, quien trabaja con Jorge Rueda en la detección de talentos infantiles y juveniles.
-ƑYa no quieres ser la sombra de Jorge Rueda?
-Nadie puede obstaculizar mi trabajo. A mi hermano siempre lo he apoyado y si hay resultados es porque nos juntamos hasta en Juegos Olímpicos, donde él se acredita todo y las medallas. Tomo la decisión particular en dedicarme con mis juveniles (en Monterrey), hasta ahí acabó la relación y el trabajo. El que lo disfrute y que lo aproveche. Le pedí dos años para demostrarle quién era el mejor. Llevamos un año y mis clavadistas llevan seis de oro y cuatro de plata.