Según defensor de los derechos humanos se trató de una ejecución extrajudicial

Presentan 20 fotografías para demostrar la tortura aplicada a Vélez Mendoza

El funcionario Carlos Javier Vega no aceptó el debate con el padre del supuesto secuestrador

ENRIQUE MENDEZ

La familia de Guillermo Vélez Mendoza presentó ayer 20 fotografías de lesiones sufridas en diversas partes del cuerpo del presunto integrante de la banda Los Antrax, imágenes con las que se demuestra -según un análisis realizado por la Liga Mexicana de la Defensa de los Derechos Humanos- que fue víctima de una "ejecución extrajudicial producto de la tortura a la que fue sometido" por dos o más agentes de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI).

El padre del presunto plagiario, Guillermo Vélez Pelayo, después de observar las fotografías tomadas por peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) expresó su indignación porque la PGR haya encubierto pruebas de que su hijo fue torturado, y afirmó que por ese motivo es la lucha que libra para limpiar la imagen de Vélez Mendoza.

"No puedo aceptar que haya sido torturado y que todavía me lo quieran difamar diciendo que era un secuestrador. No es posible que este hecho se deje pasar por alto, porque nunca más debe repetirse un caso de tortura, porque esto le puede ocurrir a cualquier joven que caiga en manos de los agentes, que todo lo encubren y se encubren unos a otros."

Las fotos fueron presentadas por el presidente de la liga, Adrián Ramírez López, médico de profesión, en una reunión que se convirtió en conferencia de prensa, pero que originalmente estaba convocada para que fuera un debate entre Vélez Pelayo y el subprocurador de Procesos Penales B de la Procuraduría General de la República, Carlos Javier Vega Memije, quien no aceptó el reto.

Una a una, Ramírez López fue describiendo las imágenes, con lesiones, escoriaciones, hematomas, golpes contusos, posibles quemaduras con cigarrillo y sangrado en brazos, manos, cuello, rodillas, tórax, cuello, nariz, detrás de las orejas, la frente y genitales de Guillermo Vélez Mendoza.

Afirmó que estas lesiones no pudieron ser provocadas por una sola persona, esto es, el comandante de la AFI, Hugo Armando Muro Arellano, quien supuestamente sometió al presunto plagiario, aplicándole una llave china cuando, de acuerdo con la versión oficial, pretendía escapar de la policía durante el operativo del 29 de marzo pasado, cuando fue liberada la empresaria Maciel Islas, propietaria del gimnasio Alvi, donde Vélez Mendoza trabajaba como encargado.

Refirió que a partir de lo que muestran las fotografías del cadáver, Guillermo Vélez fue sujetado por dos o más agentes, que además le habrían ocasionado heridas en las uñas de las manos, tal vez por pisotones o golpes con objetos contundentes.

A partir de las tomas de las rodillas y el tórax, se deduce que además fue sometido en el piso y presionado contra una superficie rugosa. Además, sugirió que si aún estuviera vivo, las lesiones en brazos y otras partes del cuerpo le habrían ocasionado insuficiencia renal aguda por daños en los tejidos y la pérdida de sangre.

La fotografía 10 muestra una lesión detrás de la oreja izquierda, que podía deberse a un mecanismo de tortura que consiste en ejercer presión con los nudillos sobre el cuello, conocida como "trompo o pirinola", que según Ramírez López es muy dolorosa, pues se aplica en la masa muscular de esa zona del cuerpo. "Esto es, fue un acto cometido con mucha saña".

La número 13 muestra las escoriaciones y hematomas causados por la aplicación de la llave china. Dijo que al ejercer presión sobre el cuello de Vélez Mendoza, el comandante Muro Arellano le ocasionó la fractura del cartílago tiroides, lo que a su vez ocasionó la muerte por asfixia.

La parte superior izquierda de la cara revela una lesión en la nariz, que según el estudio del defensor de derechos humanos podría deberse "a una aplicación de calor, probablemente por cigarrillo".

Las últimas tres fotografías se enfocan al pene y los testículos de Guillermo Vélez, dañados por un edema escrotal, sangrado por hemorragia y con la uretra inflamada.

Todos estos elementos, algunos omitidos en la reporte de la necropsia realizada por la PGR, hacen concluir, según Ramírez López, que el supuesto plagiario no fue sometido por una sola persona, que sus heridas no pudieron ser producto de una riña de una sola persona con otra y que su muerte no fue de manera inmediata.

Por las omisiones del Servicio Médico Forense, que son relevantes en este caso porque nunca se habló antes de manera oficial que también se le aplicó castigo en sus genitales, el presidente de la liga pidió que amplíe su informe y sus declaraciones, a pesar de que el certificado está bien elaborado, pero no contiene información relevante que nunca debe dejarse de anotar en un informe de ese tipo.

Indignado por la revelación a partir del material gráfico, Vélez Pelayo dijo: "es muy duro para un padre contener el llanto al ver semejantes escenas, les pido que comprendan mi indignación por el engaño de la PGR, que me dijo que la muerte de mi hijo fue por causas inexplicables. Ellos maquillan la información, no tienen ética ni responsabilidad, mucho menos profesionalismo o sentido humano".

La familia también se hizo acompañar de Abel Fernández Valencia, párroco de la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, quien dio fe de que Guillermo Vélez Mendoza no podría haber tenido una doble vida y que nunca fue un hombre violento. Refirió que si bien lo trató muy poco tiempo, todavía poco antes de su muerte participó en la representación del viacrucis.

El párroco adelantó que en la misa del domingo se distribuirá entre los feligreses una carta en solidaridad con la familia Vélez Mendoza, en la que se exigirá justicia, no venganza, y que se aclare lo sucedido y se castigue "adecuadamente a los responsables de la injusticia para que no se vuelva a repetir". La intención es que los fieles suscriban el documento para después presentarlo a las autoridades.

Finalmente, Guillermo Vélez Pelayo presentó copias del estado de cuenta de una tarjeta de crédito, manejada en forma mancomunada entre él y su hijo, así como el original de una boleta de empeño por mil 100 pesos, que se vencía el lunes pasado, a nombre de Guillermo Vélez y copia de los vouchers por 150 y 250 pesos por consumo de comidas, encontrados en la cartera del presunto plagiario.

Al Reclusorio Sur

El juez 14 en materia de procesos penales federales, José Martínez Hidalgo, dictó ayer auto de formal prisión por cuatro delitos a los integrantes de la banda de secuestradores Los Antrax.

Los presuntos delincuentes, Clemente Nájera, Mario Alberto Núñez, Ricardo Hurtado Pérez y Adrián Muro Cabrera están acusados de violaciones a la Ley Contra la Delincuencia Organizada, privación ilegal de la libertad (secuestro) y posesión de arma prohibida.

Los cuatro serían responsables de dos secuestros distintos. Los Antrax fueron consignados al Reclusorio Sur y se les sigue la causa penal 36/2002-B. (CON INFORMACION DE MIREYA CUELLAR Y CAROLINA GOMEZ)