El líder de la ANP dijo aceptar "sin
condiciones" el plan que le presentó el enviado Anthony Zinni
Sugiere Bush sustituir a Arafat por otros líderes
en negociación de paz
Menciona como interlocutores a Mubarak, al rey de Jordania
y al príncipe de Arabia Saudita
El guía espiritual de Hamas rechaza propuesta
de Washington ante más de 3 mil refugiados
AFP, DPA Y REUTERS
Washington, 5 de abril. El presidente estadunidense,
George W. Bush, afirmó este viernes que el conflicto en Medio Oriente
puede solucionarse sin el líder de la Autoridad Nacional Palestina
(ANP), Yasser Arafat, quien podría ser sustituido por "otros líderes"
en la interlocución, y mencionó al rey Abdallah de Jordania;
al príncipe heredero de Arabia Saudita, Abdallah, y al presidente
egipcio, Hosni Mubarak.
"Mi preocupación es que Yasser Arafat no pueda
actuar. Se le han dado muchas oportunidades y ha decepcionado a su gente;
además de que hay otros en la región que pueden dirigir",
aseguró Bush, quien antes afirmó que el presidente palestino
"no está a la altura" para lograr un acuerdo de paz con Israel.
Esto ocurrió paralelamente a una reunión
que sostuvo con Arafat el enviado especial de Estados Unidos para Medio
Oriente, Anthony Zinni, en Ramallah, donde se encuentra cercado desde hace
dos semanas por las tropas de Israel, y durante la cual acordaron continuar
con reuniones palestino-estadunidenses ampliadas en las próximas
horas.
Desde su rancho en Crawford, Texas, donde recibió
al primer ministro británico, Tony Blair, el mandatario estadunidense
señaló que es posible lograr una solución pacífica
en Medio Oriente sin Arafat, y que en cambio podrían actuar el rey
jordano, el príncipe heredero saudita y el presidente egipcio, con
quienes se reunirá la semana próxima el secretario de Estado
estadunidense, Colin Powell. Sin embargo, el jefe de la diplomacia estadunidense
no tiene planeado entrevistarse con Arafat durante su próxima gira
por la región.
Insiste en que se vaya Hussein
Durante
su encuentro con Blair, Bush también señaló que "Hussein
debe irse", en referencia al presidente iraquí.
Asimismo, el vocero de la Casa Blanca, Ari Fleischer,
respondió preguntas en el sentido de si Estados Unidos no consideraba
un desaire el que el gobierno israelí hubiera rechazado su pedido
de replegarse de Cisjordania.
Horas antes de su encuentro con Blair, Bush volvió
a exigir una retirada de Israel de las zonas ocupadas en Cisjordania, aunque
acusó al presidente de la ANP de ser "responsable" de la actual
situación y de haber "traicionado la esperanza del pueblo que supuestamente
dirige".
Esas declaraciones fueron interpretadas por las personas
cercanas al primer ministro de Israel casi como un llamado a los palestinos
para que derroquen a su principal líder, según el diario
israelí Yediot Aharonoth. En entrevista con el canal de televisión
británico ITV, Bush afirmó que "Arafat no está a la
altura" para lograr un acuerdo en Medio Oriente.
Fleischer aseguró que el mandatario está
consciente de que en "una región desgarrada durante décadas
por la violencia, los acontecimientos importantes no necesariamente ocurren
de la noche a la mañana".
En aparente contradicción con las declaraciones
de Bush, este viernes se celebró la esperada reunión entre
Zinni y Arafat, en la que el líder palestino dijo aceptar incondicionalmente
las iniciativas de paz estadunidenses. "La reunión duró 90
minutos en la oficina asediada del presidente de la ANP", informó
el principal consejero palestino, Nabil Abu Rudeina, quien precisó
que la misma versó sobre los "medios para aplicar las recomendaciones
de los planes de paz Tenet (para el cese del fuego) y Mitchell (que plantea
la reanudación de negociaciones de paz israelí-palestinas,
tras un periodo de enfriamiento de hostilidades".
Estas iniciativas, sin embargo, fueron rechazadas por
el movimiento radical Hamas, que afirmó, durante una manifestación
de más de 3 mil personas en Gaza, que ni la "resistencia" ni el
presidente Yasser Arafat cederán a las presiones estadunidenses.
Este fue el primer encuentro del líder de la ANP
con una personalidad extranjera desde que se encuentra rodeado y aislado
por el ejército israelí en sus oficinas en Ramallah, después
de que Zinni fue autorizado por el primer ministro de Israel, Ariel Sharon,
a entrevistarse con el presidente palestino, con lo que aceptó romper
de manera excepcional su aislamiento.
Para continuar estas reuniones ampliadas con el emisario
estadunidense, Arafat designó a una delegación palestina
dirigida por el principal negociador Saeb Erekat. De acuerdo con radio
Israel, durante el encuentro, Zinni transmitió a Arafat la petición
del gobierno israelí de que entregue a los asesinos del ex ministro
israelí de Turismo, Rejavan Zeevi, ocurrido en octubre pasado, cuyos
autores se encontrarían en el cuartel general del líder palestino.
En el marco del encuentro, Powell dialogó vía
telefónica con el presidente palestino acerca de la nueva iniciativa
de paz para Medio Oriente propuesta por el gobierno de Washington. Rudeina
señaló que durante la conversación Arafat aseguró
que los palestinos aceptan la nueva iniciativa de paz "sin condición",
destacó Dpa.
No obstante el llamado del presidente estadunidense, Sharon
rechazó retirar sus fuerzas de las ciudades cisjordanas y mantiene
acorralado a Arafat con tanques blindados.
Pero el presidente palestino, quien se mantiene atrincherado
en lo que queda de su cuartel general, en Ramallah, no está solo
en esta aventura. La comparte con cuatro lugartenientes, guardaespaldas
y una treintena de pacifistas occidentales, quienes lograron adentrarse
a sus oficinas luego de burlar la presencia de la fuerzas israelíes,
y formaron un auténtico escudo humano alrededor del líder.
Esto pese a que la corriente eléctrica fue cortada
esta noche en las oficinas donde se mantiene el presidente palestino, expresó
Al Hindi, jefe de los servicios palestinos de Información en Gaza,
mediante un walkie-talkie, y dijo que sin embargo el ejército
autorizó el reavituallamiento en sus oficinas.
Empero, ocho franceses, de un grupo de 27 atrincherados
desde el domingo en el cuartel general de Arafat, abandonaron el jueves
el recinto, afirmó en París la cancillería francesa.
A todo esto, el primer ministro de Gran Bretaña,
Tony Blair, afirmó en entrevista divulgada por la cadena NBC que
es posible para Israel tener seguridad con Yasser Arafat como líder
palestino, al tiempo que criticó las incursiones israelíes
en los territorios palestinos.
De esta manera, manifestó su acuerdo con la posición
estadunidense de que la violencia no terminará a menos de que se
establezca "un proceso político apropiado".
Creo, dijo, "que el presidente Yasser Arafat sabe que
la existencia de Israel tiene que ser reconocida, y que no sólo
los palestinos deben aceptarlo, sino que debe ser reconocido por el mundo
árabe" afirmó Blair.
Aunque el plan de paz estadunidense fue aceptado por Arafat
en su reunión con Zinni, el jefe espiritual del movimiento radical
Hamas, jeque Ahmad Yassín, rechazó las iniciativas estadunidenses
para un cese del fuego, ante unas 3 mil personas reunidas en el principal
campamento de refugiados de Jabaliya, uno de sus bastiones en el norte
de Gaza y cuna de la primera intifada, de 1987 a 1993.
"Estados Unidos e Israel están presionando al presidente
Arafat para que acepte lo que ellos quieren", exclamó Ahmad Yassín,
y añadió que "con el plan Tenet quieren poner fin a la resistencia,
izar la bandera blanca y mantener la ocupación de nuestra tierra".
La multitud se reunió frente a la mezquita de Al
Julafa y luego caminaron por las principales calles del campamento para
que los niños quemaran banderas israelíes y estadunidenses