Jesús Ramírez, Humberto Salgado y Gerardo Alvarado, la terna para sustituirlo

Renunció el procurador de Justicia de Guerrero; niega presión de la IP

Roberto Pano Arciniegas señaló situaciones de carácter familiar como razones de su dimisión

MISAEL HABANA CORRESPONSAL

Chilpancingo, Gro., 3 de abril. El procurador de Justicia del estado, Rigoberto Pano Arciniegas, renunció hoy y, ante las acusaciones en su contra, argumentó: "he trabajado con honestidad, integridad y lealtad; es la satisfacción que tenemos".

Entrevistado al salir de sus oficinas, Pano Arciniegas rechazó que su renuncia tenga que ver con los reclamos de los dirigentes de la iniciativa privada por el asesinato del empresario Javier Ibáñez Sandoval y su chofer en una céntrica avenida de la capital del estado.

"No, definitivamente; son otras situaciones de carácter personal, desde luego, de carácter familiar. Lo real es que en este momento acabo de presentarle al señor gobernador mi renuncia... por motivos familiares y de salud fundamentalmente", dijo.

Informó que respecto al asesinato del empresario se tienen adelantos que serán informados en los próximos días.

Por su parte, el presidente del Congreso local, Héctor Apreza Patrón, manifestó desconocer la renuncia del procurador y rechazó contar ya con alguna terna para sustituir al dimitente.

Sin embargo, trascendió que existe una terna en la que figuran el director de Comunicación Social del gobierno del estado, Jesús Ramírez Guerrero, a quien incluso se considera ya procurador; Humberto Salgado Gómez, secretario general de Gobierno durante el sexenio de Angel Aguirre Rivero, y el magistrado Fermín Gerardo Alvarado Arroyo.

Al respecto, el ex preso político y ex presidente estatal del PRD Eloy Cisneros Guillén pidió al Congreso local impugnar la inclusión de Ramírez Guerrero en la terna para procurador, por considerarlo responsable de los desalojos violentos en ocho municipios, asesinatos y desapariciones durante el sexenio de José Francisco Ruiz Massieu, cuando fue secretario general de Gobierno.

Manifestó que Ramírez Guerrero es "un asesino que debería ser juzgado por las autoridades" por las muertes y desapariciones de los perredistas Andrés de la Cruz Zacapala y Daniel López Alvarez.

Dijo que en ese sexenio otros perredistas fueron asesinados en el municipio de Teloloapan y que Ramírez Guerrero tiene un "rosario de ilícitos".

Cisneros Guillén fue desalojado, detenido y encarcelado por policías estatales el 6 de marzo de 1990 cuando ocupaba el palacio municipal de Ometepec, en la región de la Costa Chica, durante los conflictos poselectorales en el gobierno de José Francisco Ruiz Massieu.

Proponen fideicomiso para pagar a secuestradores

Por su parte, José Ramón Díaz Tornes, tío de Javier Muñoz Basilio, el joven secuestrado en Atlixtac, región de la Montaña, afirmó que estudian la posibilidad de que empresarios de Guerrero formen un fideicomiso para tener fondos y pagar los rescates que demanden secuestradores de la entidad.

Manifestó que este martes iniciaron una colecta para recabar los cinco millones de pesos del rescate con la apertura de una cuenta bancaria en Bital. "Ya tenemos llamadas de personas de Culiacán, Sinaloa; Veracruz y el Distrito Federal, quienes están dispuestas a apoyarnos", aseguró.

En tanto, familiares del secuestrado iniciaron boteos en los municipios de Chilapa, Tlapa y Atlixtac, en la región de la Montaña; además de Chilpancingo, Iguala, Teloloapan y Taxco de Alarcón con el objetivo de recaudar los 5 millones de pesos que exigen los raptores, quienes aceptaron ampliar el plazo para la ejecución de su víctima en caso de que no se pague lo que demandan.

Raúl Muñoz Marcelino, padre del secuestrado y ex alcalde de Atlixtac, informó que sostuvo una reunión con el secretario de Gobierno, Marcelino Miranda Añorve, a quien demandó que no intervenga la Procuraduría General de Justicia en este caso "para no poner en riesgo la vida de mi hijo".

Según Muñoz Marcelino, el gobierno estatal se negó a proporcionar ayuda económica para pagar el rescate de Muñoz Basilio; "nos dijo el secretario que no podían darnos dinero, porque eso generaría entre los secuestradores confianza para cobrar los secuestros en la entidad".

Indicó que el martes pasado los delincuentes establecieron comunicación con los familiares del cautivo, "nos dijeron que no nos hagamos pendejos y que paguemos el rescato o de lo contrario no volveríamos a ver con vida a Javier".

Los delincuentes rechazaron la intervención en las negociaciones del obispo de la diócesis de Tlapa, Alejo Zavala Castro.

Sin embargo, aceptaron dar una prórroga a la familia para que pague el rescate y es que, según dijo el ex alcalde, lograron juntar un millón 800 mil pesos que entregarían en Chilapa a los secuestradores, pero en el trayecto fue asaltado y despojado del rescate que iba a pagar por su hijo.