EN EL CHOPO
Javier Hernández Chelico
Ultrasónicas y la Primavera
EN
SU PRIMER concierto de primavera, Radio Chopo seguramente desatará
pasiones y malos pensamientos. Las Ultrasónicas serán las
culpables, porque ¿quién osará no mirar, cual borrico
primaveral, a estas beldades? Las Ultras llegarán bien aceitaditas,
pues anoche estuvieron en su cuasi guarida, el Foro Alicia, donde seguramente
hicieron aullar a los asistentes. Y aunque la noche es la cómplice
preferida de este trío, los del Chopo desean que el sol no las derrita
y las deje tocar, cantar y hablar como ellas lo hacen.
ZOE Y CHANCHO en Piedra serán la representación
roquera varonil en la tocada de este mediodía sabatino. Los primeros
son un quinteto ?León, Sergio, Jesús, Alberto y Angel? que
le atora a un rock ecléctico ya apresado en disco epónimo
lanzado el año pasado; en cuanto a la segunda banda, viene del cono
sur ?Chile? con un muestrario de rap-hip-hop-rock. Bienvenidos los chilenos
y suerte a los mexicanos.
UNA BUENA Y UNA MALA
LA BUENA: LOS espacios creados ex profeso para
las actividades culturales en el Tianguis del Chopo han estado ocupados
casi todo el tiempo por magníficos artistas: han asistido cada sábado
diferentes músicos, fotógrafos, caricaturistas, poetas, escritores,
cineastas, performanceros, escultores.
LA MALA: EN estas actividades se ha colado, sobre todo
en Radio Chopo, gente como el grupo texano Panteón, que a la mera
hora no llega, desperdiciando así la oportunidad que otras bandas
buscan con ahínco. Tocar en Radio Chopo no sólo es eso, sino
que hay promoción en volantes, en el programa de radio y en este
espacio. Otro aspecto cuestionado es el musical: cada banda debe ejercer
la autocrítica para reconocer si ya está lista para aparecer
en vivo, no únicamente en el foro chopero sino en cualquier escenario.
Y por último, ¿cuándo se dejarán caer por estos
lares Haragán, Lira, El Gran Silencio, Panteón Rococó?
De Jaguares, Maldita y El Tri, mejor ni hablar. No asisten ni pa' firmar
autógrafos.
Todos hablando de hombres ilustres...
...Y DE ELVIS Presley nadie habla jamás. A principio
de los sesenta ya se escuchaban frases como la anterior en la radio de
la ciudad de México. También se hablaba de inadaptación
social y de rebeldes sin causa. El rocanrol llegaba a México, y
con él un modo de disidencia musical y lírica; las letras
se alejaban del bolero y de la canción ranchera para buscar un lenguaje
diferente, que incorporaba frases insólitas para esa época
?eran los sesenta?: Mis jefes me dijeron ya no bailes rocanrol, si te vemos
con La Plaga tu domingo se acabó/ ...pues yo quiero estar con ella
a todo dar.../ . Era de disfrutar lo claridoso de las letras (y aunque
digan los vetarros música infernal, pa' mí es un bello canto
que me hace soñar). Las tragedias amorosas eran a ritmo contundente
(Lucila) y lo intranscendente se bailaba a lo que daba (Larguirucha
Sally).
TODO FUE FUGAZ. Los cantantes de Los Rebeldes del Rock,
Los Locos y Los Teen Tops, entre otros, se volvieron solistas: Enrique
Guzmán se afresó con rolas tiernamente cursis; pero no había
de otra, aquí en México el rocanrol no sobrevivió
a las presiones de la liga de la decencia y a los intereses monetarios;
finalmente Guzmán le cantó a la Princesita que secretamente
buscaba un camino al cielo. Ni modo, pero el buen Quique ya había
puesto su granote de arena para que el rock floreciera por estas latitudes.
Ahora, a más de 40 años de esos acontecimientos, Enrique
Guzmán fue hospitalizado para practicarle una operación a
corazón abierto. Afortunadamente la libró, y desde aquí
nos unimos a la admiración que en reciente visita le manifestó
Miguel Ríos al vocalista y guitarra de acompañamiento de
aquellos legendarios Teen Tops.