Aceptó que la empresa alemana despidiera a más de mil 350 empleados

Líderes obreros califican como ''antisolidaria'' la decisión tomada en el sindicato de VW

Quienes perderán su empleo enfrentarán un panorama totalmente adverso: Fesebs

CAROLINA GOMEZ MENA

Para la Federación de Sindicatos de Empresas de Bienes y Servicios (Fesebs), la decisión tomada por los trabajadores de la empresa Volkswagen de aceptar el despido de más de mil 350 empleados, en lugar de reducir las jornadas y las percepciones laborales, es positiva sólo en el sentido de que se optó por consultar democráticamente la elección entre ''dos males que eran la solución para la compañía, pero no para sus trabajadores'', opinó Jaime Luis González, líder de la citada federación.

Al respecto, Enrique Aguilar Borrego, presidente de la Comisión de Asuntos Económicos y Sociales del Congreso del Trabajo (CT) y secretario general de la Federación Nacional de Sindicatos Bancarios (Fenasib), dijo que haber optado por disminuir la planta laboral fue un ''acto de falta de solidaridad'', porque los mil 350 trabajadores que saldrán de la Volkswagen enfrentarán un panorama totalmente adverso, pues no hay creación de empleo.

Para el también diputado federal, la decisión fue equivocada, porque el ofrecimiento de la empresa era disminuir sólo temporalmente las jornadas y percepciones económicas, y porque ''no se debe perder de vista la jerarquización de los valores, y el máximo valor en lo laboral es tener empleo, aunque para lograrlo haya que precarizarlo (sic)''.

A decir de González, quien es también el secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos Aviadores, ''es una tristeza que los empresarios anden recortando puestos, porque les fallan las ventas'', pero también es un triunfo que ''los trabajadores no permitan que sus empleadores se vayan por la libre'', es decir, que decidan unilateralmente su destino laboral.

Por su parte, Aguilar Borrego subrayó que la situación a la que tuvo que enfrentar Volkswagen a su planta laboral es sólo una muestra más de lo que ''día con día nos prueba el libre mercado, de que no es la mejor opción para crear satisfactores'' para los trabajadores.

Ambos dirigentes sindicales, en entrevistas por separado, coincidieron en que la forma en que la armadora afrontó la crisis derivada de la reducción de su mercado pueda ser asumida por otras transnacionales como excusa para incrementar sus ganancias a costa del sacrificio de sus empleados.

''No creo que haya posibilidad de que esta estrategia se convierta en un paradigma para otras empresas; no es posible un efecto dominó'', afirmó Jaime Luis González. ''Eso no podría suceder, los sindicatos estamos para comprobar si lo que dicen los patrones es o no cierto. No creo que esa pueda ser una posición acertada de los empresarios, sólo tendría que ser alguno loco, porque ellos saben bien que un trabajador mal pagado no rinde'', añadió el líder, para quien la decisión de los trabajadores de la armadora tuvo un tinte ''egoísta''.

A esa misma situación se vieron enfrentados los empleados de las líneas aéreas -recordó González-, luego de los atentados del 11 de septiembre, ocasión en que se optó porque ''la crisis se reflejara en el bolsillo de todos y no de unos pocos, negándonos a los despidos; mientras en la industria mundial de aviación quedaron desempleados más de 200 mil, en México no salió nadie''.