MONTERREY 2002

Elementos de la PFP impidieron el paso a unos mil 500 manifestantes

Frustrada, la última marcha contra la cumbre

Durante el recorrido hubo leves enfrentamientos con miembros de seguridad hotelera

ENRIQUE MENDEZ Y DAVID CARRIZALES ENVIADO Y CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 22 de marzo. El último intento de jóvenes, campesinos de San Salvador Atenco y organizaciones civiles de hacerse escuchar por los presidentes y jefes de Estado que participan en la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo se frustró hoy, luego de que la Policía Federal Preventiva (PFP) detuvo una marcha de casi mil 500 personas que pretendieron llegar al Museo de Historia Mexicana.

Este viernes, los ejidatarios de Atenco e integrantes de lo que fue el Consejo General de Huelga (CGH), de la Coordinadora Apoyo Mutuo, así como del Movimiento de Resistencia Anarkopunk volvieron a salir de la Alameda, esta vez hacia el museo -y después de modificar su intención de dirigirse nuevamente al Parque Fundidora-, donde ayer se realizó la encerrona de mandatarios.

Durante su recorrido, una vez más los punks realizaron pintas de rechazo a la globalización y tuvieron enfrentamientos verbales y algunos empujones con elementos de seguridad de los hoteles Best Western y Fiesta Inn. En este último, los jóvenes arrancaron de una de las tres astas del edificio una bandera de Estados Unidos y la quemaron, pero uno de ellos también fue derribado por un guardia, que enseguida huyó.

La idea de los manifestantes era dejar sus expresiones pintadas en los muros y cristales "de las trasnacionales, pero no de los comercios pequeños".

El gerente de Operaciones del hotel Days Inn, Alessandro Fosero, no los enfrentó y sólo les dijo: "Qué graciosos, hijos de la chingada". Como recuerdo, los punks le dejaron al hotel la leyenda: "Banco Mundial, banda criminal".

A pesar de que la marcha fue convocada como pacífica, en la esquina de Juárez y J.I. Ramírez, adolescentes con los rostros cubiertos con paliacates y pasamontañas enfrentaron a un taxista que protestó con su claxon por el cierre de calles.

A lo largo de toda la avenida Juárez, comercios de comida rápida, tiendas que abren las 24 horas, bancos y hoteles quedaron pintados. En un restaurante de pollo frito, los jóvenes escribieron: "Tlacoyos sí, multinacionales no".

Después de media hora de recorrido, la caravana dio vuelta en Melchor Ocampo, que deriva directamente -cruzando la Macroplaza- en el Museo de Arte Contemporáneo, situado en la misma calle que el Museo de Historia Mexicana.

Justo frente a la torre de oficinas de la Siderúrgica Lázaro Cárdenas Las Truchas (Sicartsa), 60 policías de la PFP con cascos, escudos y toletes rompieron la marcha por un costado y metros adelante formaron una valla.

Los ánimos de los manifestantes se enfriaron ante la presencia policiaca y concretaron un rápido acuerdo para detenerse ahí, realizar un mitin y regresar a la Alameda, para evitar un enfrentamiento directo con los federales.

Gerardo Fernández Noroña y uno de los dirigentes de la Coordinadora Apoyo Mutuo se acercaron al cerco policiaco, al que también llegó el director de Concertación Social de la Secretaría de Gobernación, Luis Carlos Villavaca.

-Nuestra manifestación es pacífica, vamos a hacer un alto aquí para evitar cualquier enfrentamiento con la PFP. Está muy tenso el asunto, y sólo pedimos garantías de que el cordón policiaco no se moverá. Haremos aquí nuestro mitin y nos iremos -dijo Fernández Noroña al funcionario.

-Pierde cuidado -le respondió Villavaca-, es sólo un cordón de seguridad.

El directivo de Gobernación aseguró que la presencia de la PFP era necesaria "por el evento que se está llevando a cabo en Monterrey, que no es cualquier cosa. No es ninguna provocación, es sólo la seguridad que se necesita en cualquier reunión de índole mundial".

El mitin duró unos 10 minutos, a casi 50 metros del cerco de la PFP. Sobre banqueta y asfalto se realizaron más pintas, incluso de siluetas similares a las que realiza el Ministerio Público para delimitar la posición de un cadáver sobre el piso.

Hecho eso, hicieron el mismo recorrido de regreso, pero esta vez en Juárez se incorporaron tres estudiantes del CCH Naucalpan, que llevaban una manta de apoyo a Rosario Robles Berlanga, aún candidata a dirigente nacional del PRD, lo que molestó a los organizadores de la marcha, que pretendieron impedir a las tres ceceacheras caminar junto con ellos.

Una de las estudiantes los encaró: "sí marcharon con el PT, y qué, güey".

Los punks no las querían ahí, las insultaron y cuando de plano vieron que también querían llegar hasta el campamento de la Alameda, les arrojaron pintura blanca. Las estudiantes doblaron la manta y se fueron.

Mientras tanto, este día, campesinos usuarios de Agua del Bajío, así como del distrito de riego 25 de Tamaulipas, realizaron su propia movilización hacia Cintermex, a donde arribaron en siete autobuses de pasajeros. Ahí realizaron una protesta y exigieron razones de por qué el gobierno federal ha entregado volúmenes adicionales de agua del río Bravo a Estados Unidos.

Previamente, los campesinos de Tamaulipas realizaron, por segundo día consecutivo, un plantón dentro de las instalaciones de la gerencia regional de la Comisión Nacional del Agua (CNA), en protesta porque el gobierno mexicano ha cedido al vecino país 600 millones de metros cúbicos del líquido en el año reciente, de las presas Falcón y Amistad, dejando a 14 mil 500 agricultores sin posibilidades de regar sus parcelas, ocasionando un desplome de más de 50 por ciento en la producción de granos básicos.

Jaime Garza García, gerente técnico de las asociaciones civiles de agricultores del distrito 25, que comprende 202 mil hectáreas de los municipios de Reynosa, Río Bravo, Matamoros y Vallehermoso, agregó que desde 1995 la Comisión Nacional del Agua (CNA) ha venido disminuyendo la entrega del líquido para riego, y en los recientes dos años de plano los dejó sin nada, lo mismo que a los distritos 26 de Camargo, y 50 de Nuevo Laredo, que son de menores dimensiones.

La protesta de los campesinos no sólo fue porque el gobierno mexicano, con el propósito de pagar un supuesto adeudo de mil 600 millones de metros cúbicos que se ha ido acumulando con Estados Unidos, transfirió a ese país el año pasado entre 450 y 500 millones de metros cúbicos de agua, y el pasado 16 de febrero otros 114 millones, sino porque la CNA y la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural convinieron en pagarles en dos ministraciones una compensación de mil 65 pesos por hectárea, la primera de 369 pesos antes del 31 de diciembre de 2001 y la segunda por 696 pesos antes del 31 de marzo de 2002.

Sin embargo, hasta ahora, el gobierno federal les ha pagado 36 millones de pesos, que representan 50 por ciento de la primera parte que les debe. El 6 de marzo, el director de la CNA, Cristóbal Jaime Jaques, dijo ante una comisión de senadores de la República que él daba por cumplido el convenio con el pago de esos 36 millones.

Jaime Garza García afirmó que los agricultores del distrito 25, en un afán propositivo, aceptaron el convenio, que de por sí ya era desventajoso para ellos, porque el pago prometido apenas representaba 50 por ciento de la evaluación de daños que sufrirán al no poder regar sus tierras.