MONTERREY 2002

Critica proteccionismo comercial de los industrializados

Reclama Chile reglas claras para el desarrollo de las naciones pobres

ROSA ELVIRA VARGAS Y ESTHER HERRERA ENVIADA Y CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 22 de marzo. El presidente de Chile, Ricardo Lagos, quien ante la ausencia de Brasil y los apremios de Argentina se convirtió en la voz más representativa del Cono Sur en la Cumbre Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, demandó reglas claras y mecanismos justos y equilibrados para el desarrollo de los países más pobres, y abogó por una amplia reforma en la operación de los organismos financieros internacionales.

Asimismo, pidió que las naciones en desarrollo tengan una mejor condición de acceso a los mercados internacionales de capital, como un mecanismo para mejorar los términos en que reciben financiamiento.

El mandatario sudamericano señaló que las condiciones actuales en que es prestada la asistencia financiera a las naciones son muy distintas a las que existían hace medio siglo, cuando fueron creados el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, lo que pone de relieve la necesidad de emprender una profunda transformación de los mecanismos con que son otorgados los programas de asistencia.

Además de la reforma de los organismos internacionales, el presidente Lagos denunció que el discurso sobre la apertura comercial no es respetado en la práctica por los países industrializados, quienes recurren a medidas proteccionistas para restringir el acceso a sus mercados a los bienes producidos en el mundo en desarrollo.

Dijo que si las barreras comerciales fueran eliminadas, los países pobres podrían generar negocios por un monto cercano a 130 mil millones de dólares, cantidad muy superior al monto de asistencia oficial al desarrollo que entregan los industrializados, que es de 50 mil millones de dólares.

''Hay que entender que una de las posibles causas de la mayor volatilidad en los precios de las exportaciones en los últimos años son las medidas proteccionistas de los desarrollados'', apuntó.

El mandatario chileno centró su discurso en cuatro puntos esenciales: el acceso a mercados sin barreras arancelarias, el debate de la diversidad cultural, el establecimiento de derechos especiales de giro y la propiedad intelectual para medicamentos.

Se pronunció porque los flujos de capital hacia países latinoamericanos dejen de ser altamente pro cíclicos, porque para un país como Chile el acceso a los mercados internacionales es fundamental.

De igual manera, indicó que el Consenso de Monterrey establece un nuevo escenario para la difícil tarea de articular mecanismos justos y equilibrados para financiar el desarrollo de países más pobres, y a la vez promover reformas internas imprescindibles para la administración de la financiación y tener un comercio en mejores condiciones de acceso.