Espera Cuba que se propongan fórmulas para bajar débitos

Deberá reconocerse que deuda externa inhibe el desarrollo del Tercer Mundo

PL

La Habana, 15 de marzo. El ministro cubano de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque, afirmó que su país espera que durante la Cumbre de Monterrey se reconozca la responsabilidad de los países desarrollados en la ayuda al Tercer Mundo y los obstáculos que enfrenta éste.

Pérez Roque declaró que en la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, que se llevará a cabo en esa ciudad mexicana, se deberá reconocer, además, la deuda con la mayoría de esos países, que fueron colonias de los Estados desarrollados.

"Esperamos -enfatizó- que la cumbre establezca con claridad, sin cortapisas, que la deuda externa constituye el principal obstáculo para el desarrollo de los países del Tercer Mundo."

Destacó que es "una fórmula perversa mediante la cual los escasos recursos financieros se escapan para financiar los intereses de una deuda que, sin embargo, no deja de crecer".

La deuda del Tercer Mundo, apuntó, "alcanza hoy dos y medio millones de millones de dólares, después de haberse pagado en los últimos 12 años casi tres millones de millones de dólares".

En torno a la posibilidad de un cambio de los países desarrollados respecto a su tradicional postura sobre la ayuda, el canciller cubano remarcó que éstos, liderados por Estados Unidos -"el de posiciones más negativas"-, tienen que aceptar "la necesidad de cumplir requisitos básicos para el acceso de nuestras naciones al desarrollo".

El jefe de la diplomacia de la isla expresó la necesidad de que se propongan fórmulas para aliviar la carga de la deuda o perdonar la totalidad de los débitos del Tercer Mundo.

Dijo, además, que los Estados ricos tienen que cumplir con el compromiso de dedicar no menos de 0.7 por ciento del producto interno bruto como ayuda oficial al desarrollo, ya que hoy es sólo de 0.2 por ciento.

"Deben abrir sus mercados, reconocer que hoy aplican una serie de medidas arancelarias y no arancelarias que cierran sus mercados a nuestras exportaciones", subrayó.

Precisó: "Deben reconocer la necesidad de que nuestros países accedan a nuevas tecnologías, en un momento en el que el conocimiento está cada vez más privatizado y monopolizado, en manos de un pequeño grupo de compañías trasnacionales".

Pérez Roque llamó a aceptar "la sangría que significa para los países el intercambio desigual", ya que cada vez cuesta menos lo producido por los Estados pobres y es más costoso lo que éstos deben comprar.

Afirmó que es deseable que se admita que la actual arquitectura internacional propicia la especulación financiera y el escape vertiginoso de los escasos recursos del Tercer Mundo, mediante operaciones especulativas que alcanzan hoy la cifra impresionante de tres millones de millones de dólares.

Además, en la Cumbre de Monterrey, según el canciller, deberá reconocerse la debilidad de las monedas de las naciones pobres, así como el efecto nefasto para las economías de la imposición de esquemas neoliberales, por el Fondo Monetario Internacional y otras instituciones mundiales.

"Pienso que esta cumbre deberá marcar un debate solidario en el que los países ricos reconozcan sin egoísmos, con franqueza y con modestia, que nuestras naciones viven hoy una situación insostenible, cuyas causas no pueden buscarse en errores nacionales, sino en el sistema económico internacional impuesto."

En cuanto a la posibilidad de que la conferencia pueda reflejar una integración latinoamericana, el cubano aseveró que esa unidad regional "no goza de buena salud y está sometida a grandes riesgos. El primero y más importante es la inminente instauración de un Area de Libre Comercio".

Insuficientes, recursos para el desarrollo

Mientras tanto, en Monterrey, Nuevo León, organizaciones no gubernamentales de la isla sostuvieron que con los patrones económicos actuales es insuficiente la movilización de recursos internacionales para el desarrollo, si en realidad se desean reducir las desigualdades y la pobreza.

Delegados de las ONG que encabeza la Asociación Nacional de Economistas de Cuba expresaron lo anterior durante una ponencia que presentaron en la jornada vespertina del Foro global: financiación para el derecho al desarrollo sustentable con equidad, que sesiona aquí desde ayer.