El nuevo subsecretario de Estado, "lo más
siniestro de la mafia" cubano-estadunidense
Acusa Cuba a Otto Reich de terrorista y narco
El funcionario anunció fuerte endurecimiento
de la política estadunidense hacia la isla
GERARDO ARREOLA CORRESPONSAL
La Habana, 14 de marzo. Cuba reaccionó hoy
ásperamente a la designación de Otto Reich como nuevo secretario
de Estado adjunto de Estados Unidos para Asuntos del Hemisferio Occidental,
a quien llamó "siniestro personaje de la mafia anticubana" y lo
acusó de vínculos con el narcotráfico y el terrorismo.
Reich, de 57 años, de origen cubano, emigrado a
Estados Unidos en 1960 y un anticastrista radical, asumió el cargo
interinamente el pasado lunes. En su primera aparición pública
anunció un fuerte endurecimiento de la política estadunidense
hacia Cuba y la firme oposición del gobierno del presidente George
W. Bush a flexibilizar su trato hacia la isla, promovida por sectores del
Congreso.
"Vocero de los peores intereses de la extrema derecha
estadunidense y representante de los mezquinos objetivos de la mafia anticubana,
padrino de connotados terroristas como Luis Posada Carriles y Orlando
Bosch, vinculado al bochornoso escándalo Irangate, donde
se desempeñó como profesional de la mentira, lobbysta
de la (compañía licorera) Bacardí e impulsor de la
(ley) Helms-Burton, catalogado por muchos como mediocre y lerdo, Otto Reich
ha asumido esta semana como secretario asistente de Estado para América
Latina", dijo el diario oficial Granma.
El matutino añadió que "tras ser impuesto
por la administración estadunidense, aprovechando el receso congresional,
desde sus primeros actos en tan importante posición, Reich ha comenzado
a destilar su enfermizo y visceral odio contra la revolución cubana".
Ex colaborador de Ronald Reagan
La designación de Reich fue severamente impugnada
meses atrás en el Senado estadunidense, donde legisladores recordaron
el papel del funcionario como asesor de propaganda del gobierno de Ronald
Reagan, en la agresión a Nicaragua, durante el gobierno sandinista,
en los años 80, que incluye denuncias de acciones ilegales. Para
evitar un choque con el Congreso, que debe confirmar o rechazar el nombramiento,
Bush colocó en el puesto al nuevo secretario adjunto durante el
actual receso legislativo, con un mandato provisional que termina en noviembre.
A la breve nota de Granma siguió, por la
noche, la cotidiana Mesa redonda informativa de la televisión, que
en una emisión extraordinaria de dos horas y media, llamada Otto
Reich: un terrorista en el gobierno norteamericano, desmenuzó
con amplitud y detalles el historial del funcionario, hijo de un austriaco
y una cubana, y reprodujo la batería de impugnaciones en Estados
Unidos a la designación.
"La llegada de Otto Reich significa la llegada de lo más
siniestro de la mafia cubanoamericana al gobierno de Estados Unidos, y
ha significado también el incremento de las presiones contra nuestra
región", dijo Randy Alonso, conductor del programa, quien es un
virtual portavoz gubernamental.
Rogelio Polanco, director del diario Juventud Rebelde,
órgano de la Unión de Jóvenes Comunistas, dijo, a
su vez, que los primeros pronunciamientos de Reich "no pueden intimidar
a Cuba", y ratificó que la posición oficial de la isla continúa
siendo la de abogar por el cese del bloqueo económico y la normalización
de relaciones con Estados Unidos.
Añadió que Reich vaticina una política
que busca "la confrontación, que se produzcan incidentes que agraven
el clima entre los dos países", en sentido contrario a "las tendencias
que están mostrando cada vez más oposición" a la línea
de hostilidad y cerco económico. El nuevo funcionario se inclina
por imponer "condicionamientos políticos inaceptables a nuestro
país y frenar esta tendencia creciente de sectores de aquel país".
Polanco previó que la nueva línea estadunidense
será de "apoyo prioritario a la oposición interna y a los
grupúsculos contrarrevolucionarios". Subrayó que uno de los
anuncios de Reich es "incrementar el flujo informativo" hacia Cuba, a través
de Tele Martí y Radio Martí, emisoras que transmiten a la
isla y "que han causado tantos incidentes y tantas y tan graves provocaciones
como las más recientes", en alusión a la invasión
de la embajada mexicana, hace dos semanas.
El nombramiento de Reich es un fuerte golpe a la tendencia
de apertura comercial surgida hace seis meses entre los dos países.
"No vamos a ayudar a Fidel Castro a permanecer en el poder abriendo nuestros
mercados", dijo el funcionario en su primer discurso público en
el cargo, en el Centro para Estudios Internacionales Estratégicos
de Washington, el martes pasado. Estados Unidos puede acelerar una "transición
pacífica y rápida" en Cuba, y no auxiliar a "un régimen
fracasado, corrupto, dictatorial y asesino", agregó.