Necesario, el apoyo de los industrializados: Robinson

Naciones menos desarrolladas deben recibir los beneficios del crecimiento

ROBERTO GONZALEZ AMADOR ENVIADO

Monterrey, NL, 14 de marzo. Los países industrializados están obligados a apoyar con mayor apertura comercial, inversión y programas de reducción de deuda los esfuerzos de reforma económica instrumentados en las naciones menos desarrolladas, con el propósito de alcanzar los objetivos mundiales de reducción de la pobreza, consideró Mary Robinson, alta comisionada de Naciones Unidas para Derechos Humanos.

En un mensaje enviado al foro global Financiación para el Derecho al Desarrollo Sustentable y con Equidad, que comenzó hoy sus trabajos, Robinson señaló que los países menos desarrollados deben comenzar a recibir los beneficios del crecimiento en el comercio internacional, y en ese sentido consideró que la cumbre de Monterrey abre una oportunidad para involucrar a todas las naciones en el diseño de un sistema económico global más equitativo.

El foro se desarrollará entre este jueves y el sábado próximo; sus conclusiones serán entregadas a los delegados de gobiernos de 180 países que asisten a la Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo, convocada por la Organización de las Naciones Unidas, que inicia formalmente sus trabajos el lunes.

Mary Robinson recordó en su mensaje que la Cumbre del Milenio, realizada en 2000 y en la que la ONU trazó el objetivo de reducir a la mitad el número de personas que viven actualmente en situación de pobreza en el mundo, dejó claro que los países tienen una responsabilidad colectiva de desarrollar para sus sociedades principios de dignidad humana, igualdad y equidad.

''Espero que la conferencia de Monterrey genere un más claro entendimiento del significado en el terreno práctico del término 'responsabilidad colectiva', así como un renovado compromiso con los objetivos de la Cumbre del Milenio y con una profundización de las acciones para asegurar el respeto de todos los derechos humanos internacionalmente conocidos, incluido el derecho al desarrollo'', estableció Robinson.

Sostuvo que parte de esa responsabilidad es asegurar que los países en desarrollo se beneficien más del comercio internacional. La cumbre, señaló, debe reforzar el compromiso adoptado por la reunión de la Organización Mundial de Comercio, llevada a cabo en noviembre pasado en Doha, Qatar, para garantizar que las naciones menos desarrolladas tengan un papel activo en futuras negociaciones sobre apertura comercial.

Al mismo tiempo, expuso, la conferencia debe enviar un claro mensaje a la ONU, BM, FMI y OMC sobre la necesidad de una mayor cooperación. ''La implementación de normas y estándares internacionales, incluidas las relacionadas con el campo de los derechos humanos, debe ser el objetivo central de esos esfuerzos'', apuntó.