Pide tomar con cautela propuesta de aeropuerto en Tizayuca

Demanda la UNORCA a López Obrador apoyar reformas al artículo 27 constitucional

BERTHA TERESA RAMIREZ

El coordinador ejecutivo de la Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesinas Autónomas (UNORCA), Alberto Gómez Flores, demandó al jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, que apoye las reformas al artículo 27 constitucional que impulsan organizaciones ejidales, para evitar que la crítica situación que vive el campo lo convierta en botín de intereses mercantiles.

Tras afirmar que el agro no está en venta, señaló: "necesitamos crear condiciones favorables para vivir de la agricultura". Dijo además que la protesta de los ejidatarios del estado de México pone en la agenda nacional el asunto de la propiedad social de la tierra. "Si bien tenemos un campo en crisis, no estamos dispuestos a ceder nuestras parcelas", advirtió.

Lo anterior, agregó, significa revisar el artículo 27 constitucional en dos aspectos: primero, que las sociedades mercantiles no tengan acceso a la tierra, y segundo, que la parcela ejidal sea patrimonio familiar e inembargable.

Las reformas se hacen necesarias porque en la pretensión de querer meter al mercado las tierras ejidales y comunales hay mucha impunidad. En ese sentido, mencionó la expropiación en el cerro del Chiquihuite a favor de Tv Azteca; la intención de convertir en campo de golf tierras comunales de Morelos, y la expropiación de tierras ejidales en San Salvador Atenco, entre muchos otros casos, lo que obliga a realizar grandes reformas en materia de tierras, "porque no es posible que estemos sujetos a los grandes intereses del capital y que esa sea la lógica que predomine en las ciudades".

Respecto de la propuesta del gobierno capitalino para que el aeropuerto alterno se construya en Tizayuca y no en Texcoco, pidió cautela: "hay que revisar si hubo dolo, si estuvo en orden la compra de terrenos por grupos políticos en el caso de Hidalgo".

En estos tiempos necesitamos que las cosas se hagan con transparencia y que la gente que va a ser beneficiada o afectada exprese su opinión".

Señaló que la situación que enfrenta el campo requiere un reordenamiento territorial; "ne-cesitamos conservar las tierras, generando recursos naturales, pero que esa conservación se refleje en los bolsillos de los ejidatarios y comuneros".

La reforma debe permitir que ese sector social siga siendo un bien no sólo para los poseedores, sino para la sociedad, lo que significa planear el crecimiento de las ciudades y el papel de la tierra en este crecimiento.