Alejandro Nadal
QWERTY va al mercado
El teclado de las computadoras y máquinas de escribir invita a dudar de las virtudes del mercado. La distribución de las letras está especialmente diseñada para hacer más lenta la escritura en la máquina, no para maximizar la velocidad.
ƑCómo se impuso en el mercado semejante solución?
En 1868, Christopher Sholes obtuvo la patente de la máquina de escribir mecánica. Cada martinete con sus letras y símbolos de puntuación tenía un contrapeso que hacía regresar la tecla a su posición original. Pero cuando se usaban ciertas combinaciones de letras, los brazos accionados por las teclas tendían a atascarse y había que destrabarlos manualmente. Para resolver este problema, la distribución de letras en el teclado de la máquina hacía más lenta la escritura y evitaba que las teclas se trabaran. Las combinaciones de letras más usuales (en inglés) fueron colocadas lo más lejos posible, y los dedos más débiles de la mano debían oprimir las teclas más usadas. Las letras QWERTY aparecen en la fila superior.
En 1873 los derechos de esta patente fueron adquiridos por la compañía Remington y la solución del problema mecánico reduciendo la velocidad de operación dominó el mercado. El teclado con la configuración QWERTY se consolidó en el mercado.
En 1936 Augusto Dvorak (primo del compositor) patentó un teclado diferente. La descripción de su patente asevera que se logra mayor velocidad porque hay mejor distribución de tareas entre las dos manos y mayor carga de trabajo para los dedos más fuertes. La superioridad del teclado Dvorak ha sido recientemente demostrada en un análisis del Instituto Santa Fe para el estudio de sistemas complejos y fenómenos no lineales. Sin embargo, el teclado Dvorak nunca obtuvo la aceptación del mercado.
El advenimiento de las máquinas eléctricas y las computadoras no cambió este estado de cosas. En la actualidad el teclado QWERTY es dueño absoluto del mercado porque el costo de cambiar a una disposición de letras distinta para maximizar la velocidad no es despreciable. Ninguna compañía adquiere teclados Dvorak por el costo que representa entrenar a miles de secretarias en el uso del nuevo teclado. La solución menos eficiente sigue dominando el mercado.
Este es un clásico ejemplo de lo que los economistas llaman "fallas de mercado" y se debe a la presencia de rendimientos crecientes: la probabilidad de adopción del teclado QWERTY aumentaba mientras más usuarios lo adoptaban, consolidando el dominio de esta tecnología en el mercado.
Pero este hecho no es excepcional. La historia de la técnica presenta muchos casos en los que el azar o la necesidad técnica son detonadores de procesos acumulativos que terminan por imponer asignaciones ineficaces. En resumen, el mercado no siempre adopta la mejor solución.
En las industrias en las que los costos unitarios se reducen fuertemente al aumentar la participación en el mercado, los fenómenos estilo QWERTY se producen con mayor facilidad y rapidez. En las ramas de alta intensidad tecnológica (altos costos de desarrollo tecnológico) este proceso es más agudo. Por eso en la biotecnología, la farmacéutica, la electrónica o la aeronáutica hay un altísimo grado de concentración del mercado en pocas empresas. Las barreras a la entrada son muy altas y a veces se erigen a través del control de canales de distribución, o costosas campañas de publicidad. Ingresar para competir es muy difícil, a menos que se tenga una innovación importante, una sólida base de recursos financieros, o ambas cosas. A menudo, sólo el apoyo decidido del Estado y una política industrial vigorosa permiten el ingreso en esas ramas.
La teoría económica está basada en el principio de mercados bien comportados: el exceso de demanda de un bien provoca un incremento en su precio y una reducción de la demanda. Se supone que estas reacciones estabilizan la economía hasta alcanzar un equilibrio en el que la solución es óptima.
Pero el mundo no funciona así. Y como en la industria capitalista los rendimientos crecientes son más bien la regla general, con frecuencia se consolida el dominio del mercado por un producto poco eficiente (y hasta nocivo para la salud y el medio ambiente) casi de manera irreversible.
Lo que sucede a nivel de producto o de mercado puede ocurrirle a toda una economía. Los procesos acumulativos estudiados por Gunnar Myrdal hace 50 años pueden amarrar irreversiblemente una economía completa en una trayectoria o una estrategia de desarrollo equivocada. Con sus distorsiones sectoriales y regionales, crisis crónicas y altos niveles de pobreza, Ƒestará atándose México a una estrategia de subdesarrollo estilo QWERTY?