Encuesta del BID
América Latina recibió 23 mil mdd en remesas de migrantes
DPA Y NOTIMEX
Washington, 24 de febrero. América Latina recibió el año pasado 23 mil millones de dólares en remesas de latinoamericanos que emigraron a países ricos y que envían efectivo a sus familias.
De este monto, la mayor parte proviene de los inmigrantes más pobres, reveló una encuesta sobre el tema encargada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y cuyos datos son aplicables a los latinoamericanos que laboran en Estados Unidos -desde donde se envía 80 por ciento de las remesas- y en Europa, Japón y Canadá -de donde proviene el 20 por ciento restante.
El monto enviado en 2001 representa una vez y media lo que pagó toda América Latina por concepto de intereses de deuda externa en los últimos cinco años; por ello, las remesas son fundamentales para la economía de la región y significan un ingreso superior a lo que recibe en préstamos y donaciones de ayuda al desarrollo.
Del total de las remesas que llegan cada año a los países de la región, México es el principal receptor con 9 mil 273 millones de dólares, y también es el que mayor población aporta a la fuerza laboral en Estados Unidos. La cifra representa el doble de sus exportaciones agrícolas y significa un ingreso que ya superó a la importante industria turística; después de sus exportaciones, la principal fuente de divisas de México son las remesas de sus emigrantes.
En otras naciones de América Latina y el Caribe los envíos representan 10 por ciento o más del producto interno bruto (PIB). No pocos presidentes latinoamericanos admiten que sin las remesas las economías de sus países tendrían serias dificultades para no declararse en total bancarrota.
Para sorpresa de muchos, los envíos provienen de los más pobres: 64 por ciento de los latinoamericanos que viven y trabajan en Estados Unidos y mandan remesas a sus hogares son individuos cuyo núcleo familiar tiene un ingreso inferior a 30 mil dólares anuales, que en ese país se enmarca dentro de un nivel de vida extremadamente modesto. Sólo 21 por ciento de los envíos provienen de trabajadores cuyos ingresos superan los 30 mil dólares al año.
Según el sondeo realizado por Bendixen y Asociados de Miami, Florida, el 15 por ciento restante no reveló su nivel de ingreso. El número de operaciones de envío asciende a 100 millones y, en promedio, cada remesa es de 200 dólares que se envían entre siete y ocho veces al año.
La encuesta indica que 71 por ciento de los que mandan apenas han estudiado la secundaria o menos, mientras los graduados de la universidad sólo dan cuenta de 10 por ciento de los efectivos.
''No puedo ni pensar en dejar de enviar dinero a casa porque mi mamá y mis dos hermanos comen gracias a lo que yo les mando'', dijo un salvadoreño que trabaja en un estacionamiento del centro de Washington. ''Me arreglo con lo que me queda, que es poco, pero me las aguanto y ya. Por lo menos para comer tengo'', agregó el inmigrante, que envía mensualmente 120 dólares.
Después de México, Brasil recibe 2 mil 600 millones de dólares; El Salvador, mil 972 millones; República Dominicana, mil 807 millones; Ecuador, mil 400 millones; Jamaica, 959 millones, y Cuba, 930 millones, indicó el análisis que considera un total de 14 países.