Washington dice estar abierto ante cualquier
pedido de ayuda de Bogotá
Bombardea la aviación colombiana 85 puntos rebeldes
estratégicos en la zona desmilitarizada
EU afirma que "no considera" enviar tropas de combate
para luchar contra las FARC
AFP, DPA Y REUTERS
Santafe de Bogota, 21 de febrero. La fuerza aérea
colombiana bombardeó durante toda la madrugada de hoy unos 85 puntos
estratégicos en las zonas selváticas del sur del país
en 200 misiones, luego de que el presidente Andrés Pastrana anunció
la víspera el fin de la llamada zona desmilitarizada al romper el
proceso de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Con un fuerte apoyo nacional e internacional en su decisión
de terminar con más de tres años de negociaciones con la
mayor insurgencia del país, a causa del secuestro de un avión,
Pastrana afirmó sin embargo este día que las puertas del
proceso de paz con las FARC siguen abiertas, pero ahora tendrán
que hacerlo en condiciones muy distintas.
Pastrana declaró esta noche a la televisora CNN
que en esta nueva etapa de rompimiento con la insurgencia no hará
ningún llamado a tropas extranjeras, al puntualizar que Colombia
ha sabido afrontar el conflicto armado durante más de 38 años
y aun así ha logrado hacer crecer su economía ante el concierto
internacional, por lo que dijo que los inversionistas nada tienen que temer.
Asentó
que de todos modos Colombia cuenta con el apoyo de la comunidad internacional
en la presente coyuntura, incluyendo a los países vecinos limítrofes
y regionales, y que lo único que pedía de Estados Unidos
es que permita a su ejército usar su asistencia militar actual antidrogas
para enfrentar al "narcoguerrillerismo".
Ante las declaraciones recientes de Pastrana, Estados
Unidos dijo estar abierto a cualquier pedido de ayuda militar de Colombia
si así lo requiere para combatir a la guerrilla.
El subsecretario de Estado para Asuntos Interamericanos,
Otto Reich, indicó que Washington "no considera en modo alguno una
intervención con tropas de combate" en Colombia tras la ruptura
del proceso de paz.
Tras los primeros bombardeos masivos con bombas de hasta
500 libras sobre campamentos y pistas clandestinas de las guerrillas, la
fuerza aérea anunció que al anochecer de este jueves se reanudó
una segunda etapa de ataques desde aviones OV-10, AT-37,
K-Fir y helicópteros Black Hawk, procedentes de la
base Tres Esquinas, en Caquetá, donde Estados Unidos tiene tropas
acantonadas.
En las operaciones intervienen entre 13 mil y 15 mil soldados
de la aviación, el ejército y la marina, que actúan
en lo que se denomina Operación Tanatos, encaminada a recuperar
los 42 mil kilómetros cuadrados que en 1998 Pastrana cedió
a las FARC como un espacio de negociaciones de paz, y que consideró
ahora que sus objetivos fueron violados al usarlo como punto estratégico
para continuar con la guerra de guerrillas.
Declaradas en estado de máxima alerta, las tropas
del ejército avanzaban esta noche hacia lo que los mandos militares
denominan la "segunda línea" para retomar la zona de distensión,
y una vez alcanzado ese objetivo sin plazo determinado continuarán
su desplazamiento hacia la "primera línea", que será el ingreso
propiamente dicho al área controlada por la insurgencia.
Lo que es llamada la "segunda línea" lo constituyen
los límites de la ex zona de distensión, cuyas tropas salieron
desde la ciudad de Florencia, una de las más cercanas. No obstante,
el avance se efectúa de manera lenta y cautelosa ante el temor de
áreas minadas y de ser objeto de emboscadas.
Se sabe que al menos cuatro batallones intervienen en
estas acciones, mientras aeronaves de combate se alistan a despegar también
de las bases de Apiay -cerca de Villavicencio, Meta- y Palanquero, en las
nuevas misiones para la madrugada del viernes.
De hecho, dijo la comandancia de la fuerza aérea,
esta noche se realizaron ya otras 56 misiones y se destruyeron 13 objetivos
con múltiples blancos de las FARC.
El general Héctor Fabio Velasco, de la fuerza aérea,
dijo que un avión K-Fir de fabricación israelí
fue impactado por fuego antiaéreo rebelde durante uno de los bombardeos
que destruyeron campamentos, así como depósitos de armas
y combustible.
Llamados a la deserción
Durante las incursiones las aeronaves han descargado cientos
de volantes en los que se insta a los guerrilleros a que deserten de las
filas de las FARC, y reciban así los beneficios de la reinserción
a la sociedad civil y con comentarios de "bienvenido a la libertad".
El jefe de las fuerzas armadas, general Fernando Tapias,
afirmó que las tropas no tomarán represalias contra los campesinos
que viven en la zona de despeje que controlaban las guerrillas, que comprenden
cinco municipios con unos 100 mil habitantes en total. Afirmó que
el ejército combatirá además a los paramilitares de
derecha que intenten atacar a los pobladores.
Al tiempo que periodistas de medios colombianos y extranjeros
que intentaban ingresar a la zona desmilitarizada se vieron impedidos de
hacerlo por el ejército, se supo que en San Vicente del Caguán
?el principal poblado en la zona? reinaba la calma, ya que no había
desplazamientos de la gente.
Trascendió que más bien fueron los guerrilleros
quienes decidieron abandonar los poblados ante el anuncio presidencial
de po-ner fin al área de distensión.
Mientras comandantes del ejército admitieron que
tendrán que sufrir bajas al entrar por tierra, un guerrillero en
la zona de distensión señaló que saldrán de
los cascos urbanos pero no de las áreas rurales donde han estado
por años, porque están preparados para el combate.
Incluso la guerrilla mantenía un retén entre
las localidades de Paujil y El Doncello, frente a la zona en conflicto,
en donde una mujer resultó herida al parecer accidentalmente.
Aunque la medida presidencial de romper los diálogos
de paz parecían tener apoyo casi unánime de los diversos
sectores políticos y sociales del país, había temores
de que las FARC lancen una ofensiva sobre las principales ciudades como
reacción.
La mayoría de los candidatos presidenciales dieron
su apoyo a Pastrana, como el derechista Alvaro Uribe, que encabeza las
en-cuestas para mayo próximo. Fuerte crítico del esquema
de paz del presidente, Uribe lo instó a permitir la entrada de tropas
extranjeras en el marco de un plan antiterrorismo.
Al cierre de esta edición no se conocía
reacción alguna del candidato presidencial liberal, Horacio Serpa,
segundo en las en-cuestas. Sólo hubo críticas del opositor
iz-quierdista Luis Eduardo Garzón, aunque ad-mitió que gobierno
y FARC se equivocaron al negociar sin un cese del fuego.
Finalmente, el ejército afirmó que las FARC
tienen secuestrados en la zona desmilitarizada a unos 30 extranjeros y
a decenas de colombianos, en momentos en que el canciller Guillermo Fernández
de Soto explicó a la Unión Europea las razones de su gobierno
para poner fin a las negociaciones de paz.