Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 20 de febrero de 2002
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Espectáculos

MUSICA

Andrés Ramírez

Una noche en la Tijuana de los Nortec

EL DESMADRADO CORAZON de Tijuana está entre la calle Revolución y la barda metálica que nos separa de los güeros. En sus avenidas se ven chamacos de la calle (unos cabronzotes, no escuincles con chicle en la boca), muchos en muletas: sacan lana para arponearse, dejándose golpear por los coches y exigiendo un varo a cambio de no ir con los polis. Los picaderos están por ahí: cerca de los gringos y muy adentro de Tijuana.

SI MAL NO recuerdo (la memoria es algo más relativo que el tiempo) el antro Don Loope está al principio de la calle Revolución, la famosa avenida donde los congales de putas, música tropical, tables y demás se encuentran; pero Revolución es sólo una probadita: en la calle de Coahuila es donde Tijuana es lo que todo mundo, y Manu Chao, quieren que sea: sexo, alcohol y mariguana.

DON LOOPE ES la comandancia general del Colectivo Nortec, es la Bablilonia electrónica dentro de la Babilionia fronteriza, bizarra, al margen de Latinoamérica. Ahí, a diferencia de casi toda la ciudad, sirven la cerveza Tijuana, hoy en extinción. El antro es de los Nortec: ellos regentean, contratan a los diyéis, idean el desmadre. Llego con Luis Humberto Crosthwaite, Roberto Castillo, Julián Herbert y otros compas de por ahí. Venimos de la presentación del libro de Crosthwaite, Idos de la mente, homenaje anarquista a la música norteña, base medular del sonido Nortec. Venimos a oír música y beber cerveza. Y a buscar a un compa de ellos: Pedro Gabriel Beas, conocido como Hiperboreal, el más joven de los nortecos.

CUANDO LLEGAMOS AL Don Loope se oye un house medio aplatanado, previsible. Beas me dice rato después que "es un chavo que empieza. Pero mañana es noche de estrellas: vienen Fusible, Bostich, Terrestre y otros". El lugar se nota improvisado, funky: al fondo hay unos sillones desvencijados, y las mesas y bancos altos de fierro no son nada cómodos. Don Loope tiene un aire híbrido que va con lo que hace Nortec.

BEBEMOS E INTERCAMBIAMOS breves oraciones sobre lugares comunes.

ALGUNOS CHAVOS BAILAN libremente: vino poca gente pues hay otro antro electrónico que está pegando, el Galaxy, donde, me dicen Luis Elia Flores y Julián Plascencia, orquestadores de ese antro y Escénica -fusión de danza, artes plásticas y música electrónica-, el sábado también habrá buen desmadre. Y entonces viene un razonamiento ya obvio: con Guadalajara y su nopal beat, Tijuana es el centro de la música electrónica en México; por aquí pasan primero los mejores diyéis del underground; al DF sólo llegan las big stars, los taquilleros: Deep Dish, Fatboy Slim, recientemente.

PERO EN TIJUANA el movimiento no es tan comercial; es de búsqueda aún, de exploración de las posibilidades de la música electrónica.

DE DON LOOPE decidimos ir al Estrella, el más famoso antro de Tijuana. Miles de historias envuelven su aura mítica. Beas me cuenta: "Un día oí una rola que me pareció lo máximo. Era una rola de salsa con una línea de bajos poca madre. Fui con el de los discos para ver si me lo vendía. Le ofrecí 10 dólares y nada; llegué hasta 100 dólares y nomás no quiso. Eso es ser un diyéi celoso de sus secretos".

PEDIMOS MAS CERVEZAS. Entre las putas, los malencarados narcos de tercer vuelo, la población satélite que busca llegar a San Diego, y los tijuanenses más reventados, la música cabaretera, machacona, sensual del Estrella es la protagonista. Me dice el también llamado Hiperboreal: "De aquí nos inspiramos para armar el desmadre Nortec. Estas son nuestras raíces. Sin este lugar no somos nada".

CUANDO PARECE QUE nos acercamos al final de la noche y las cervezas empiezan a perder sabor, me dice que en marzo del 2002 aparecerá el segundo volumen de las Tijuana Sessions en Mil Records. Pero después surge el otro gran tema de Pedro Gabriel Beas: la poesía de Fernando Pessoa, poeta portugués, uno de los más importantes de nuestra literatura contemporánea. Me cuenta de cuando estuvo con los nortecos en Lisboa, la ciudad de este poeta, y rentaron un cuarto en el mero centro de la ciudad para poder impregnarse de los ambientes de Pessoa. Beas, quien estudió letras, se ve tan emocionado al hablar de los poemas del hombre con más heterónimos en la literatura como de Tricky, a quien le abrirá en Nueva York a fines de noviembre.

ESA ES MI sorpresa: un extraño encuentro de literatura y música electrónica. Nada descabellado para Tijuana, el lugar más híbrido del planeta.

PARA ANDAR IGUALES: De la importadora independiente JM Distribuidores, que se ha abocado a traer lo mejor de varias marcas underground de música electrónica, nos llegan del sello Quango estas novedades imprescindibles con aires downbeat y chill out: Lush life, Space jazz, Mystic grooves, Dub selector, Cosmic funk, Brazilified, así como el primer elepé de Noaki Kendi, Downtown Tokyo, excelente fusión de drum and bass y ambient. Ya saben.

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