ASTILLERO
Julio Hernández López
COMO EN un cuento de hadas: al final, vivieron
felices. Tanto brinco estando el suelo tan Marcelo. Pejelagarto 1, Botas
0. Ganador: el árbitro, Manuel Camacho. Cambios en la alineación:
Jenny Saltiel deja la Secretaría de Transportes y Vialidad (para
que reciba un premio de consuelo la revelación de la semana, Francisco
Garduño) y brinca a la Secretaría de Desarrollo Económico,
cuyo titular, Alejandro Encinas, a su vez, pasa a la subsecretaría
de Gobierno que deja el ya mencionado Garduño. Círculo perfecto:
nadie se quedó sin silla; uno la cambió del Distrito Federal
a Morelia (Leonel Godoy) y otro dejó la congeladora para entrar
de bateador emergente (Marcelo Ebrard).
EN EL ANECDOTARIO quedarán los aceleres
declarativos de los robocops y los perversos, y de la falta de planes estratégicos
y la desinformación respecto al estado de la seguridad pública
capitalina. El Presidente y su esposa podrán seguir paseando los
domingos por las plazas chilangas entre aplausos populares. El jefe de
gobierno reasumirá la tregua frente a Fox y seguirá tejiendo
rumbo al 2006. ¡Aleluya: los problemas se han arreglado, como proféticamente
lo había dicho el domingo el cardenal Rivera Carrera! Gran alegría
hay entre el pueblo al ver que con tanta civilidad, cordialidad y buena
fe los jefes se han arreglado. Ahora sí: todos felices y contentos.
MUCHISIMA MENOS miel hubo, en cambio, en el primer
debate entre candidatos perredistas a la directiva nacional. El domingo,
en un hotel de la ciudad de México, se le volvió a aparecer
a Jesús Ortega el fantasma de la ley Diego-Bartlett. Traidor,
le gritaron algunos de los presentes al aguascalentense por aquella maniobra
oscura en la que la bancada del sol azteca apareció aprobando la
reforma constitucional sobre indigenismo, contraria a los intereses zapatistas.
Por más que el candidato a presidir el PRD trató de explicar
las razones de aquel movimiento, sus adversarios insistieron en ese encuentro
en reclamarle turbiedades y sospechas.
EN EL ZOCALO de la ciudad de México, mientras
tanto, el gobernador de Oaxaca engrosaba la lista de mandatarios estatales
inconformes con la manera foxista de administrar los recursos federales.
A pesar de que la Cámara de Diputados asignó en diciembre
pasado partidas específicas para construir carreteras en aquella
entidad (con Huatulco como destino), la Secretaría de Comunicaciones
y Transportes no entrega los fondos necesarios para el cumplimiento de
tal obra. Acompañado de una notable representación de la
comunidad oaxaqueña ?no sólo diputados federales y senadores
de todos los partidos, excepto, naturalmente, del PAN, sino, además,
dirigentes de los organismos empresariales de la entidad y líderes
indígenas?, el gobernador José Murat sostuvo un plantón
de protesta frente a Palacio Nacional. Según señaló
el mandatario estatal, el secretario de Comunicaciones y Transportes del
gobierno federal, Pedro Cerisola, se les ha escondido a las autoridades
oaxaqueñas, al grado de no tomarles ni una llamada telefónica.
Para variar, hubo de intervenir Vicente Fox como bombero de sí mismo,
y dio ayer mismo una cita a Murat, con lo que se levantó el insólito
plantón.
OTROS GOBERNADORES priístas amanecieron
con buenas noticias electorales. Manuel Angel Núñez Soto
y Joaquín Hendricks han mantenido el control político de
Hidalgo y Quintana Roo gracias al triunfo de sus candidatos a presidencias
municipales y diputaciones locales. Aun cuando los datos disponibles todavía
son preliminares, en ambas entidades aparece como triunfador el PRI, con
notable amplitud, mientras que el PAN muestra retrocesos que mucho deberían
preocupar a su directiva nacional y al Presidente de la República
llegado al poder gracias a las siglas de ese partido blanquiazul.
EN QUINTANA Roo, por ejemplo, el PRI habría
ganado todas las curules locales y las alcaldías, excepto la de
Benito Juárez, donde está Cancún, que se habría
llevado en una final de fotografía un panista, Juan Ignacio García
Zalvidea, que dejó de serlo cuando su partido le negó la
oportunidad de ser candidato a la presidencia municipal. Arropado por el
Partido Verde Ecologista de México, el ex panista había conseguido
20 mil 742 votos a favor, contra 20 mil 448 del priísta líder
de taxistas Víctor Viveros, y 19 mil 149 del fundador de Amigos
de Arturo Durazo en aquella zona, Gastón Alegre, quien compitió
a nombre del PRD. De acuerdo con tales datos, proporcionados por el Programa
de Resultados Electorales Preliminares, el ex panista habría ganado
con 294 votos de diferencia sobre su más cercano competidor. Su
partido original, el PAN, en cambio, habría quedado en el cuarto
lugar de la contienda, apenas con 9 mil 691 sufragios conseguidos. Dado
que estaría ganando todas las diputaciones locales de mayoría,
y todas las presidencias municipales, excepto la que abarca Cancún,
en aquellas tierras se habla de que el PRI consiguió carro completo,
pero perdió el lugar donde se llena la cartera para cargar gasolina.
EN HIDALGO, a su vez, el PRI estaría ganando
también todas las curules de mayoría y los principales municipios.
La novedad allá es que el PRD habría desplazado al PAN del
segundo lugar de preferencias electorales. Según Dulce María
Sauri, tales reacomodos serían una demostración del rechazo
de los ciudadanos a la manera de gobernar del presidente Fox.
DIA, PUES, de gobernadores. El de la ciudad de
México, jugando a los encantados. El de Oaxaca, recordando
tiempos estudiantiles. Los de Hidalgo y Quintana Roo, reinstalando las
viejas glorias del carro (ahora semi) completo.
ASTILLAS: JACOBO ZABLUDOVSKY
recibirá mañana el Premio Nacional de la Comunicación
que otorga el Consejo de la Comunicación, organismo sucesor de lo
que fue el Consejo Nacional de la Publicidad. No ocultará este tecleador
su postura crítica hacia el tipo de periodismo que durante largo
tiempo hizo Zabludovsky en Televisa, convertido en un soldado más
del PRI y del sistema, presto siempre a convalidar los intereses del poder
y a ocultar, retorcer o acomodar hechos periodísticos a tales conveniencias
supremas. Pero tampoco habrá de negar este escribiente que ahora,
en esta nueva etapa, al frente de un noticiero radiofónico, Jacobo
se ha convertido en un agradecible oasis profesional entre las estridencias,
los despropósitos, las amarguras, la ignorancia y las altanerías
de otros conductores de programas periodísticos. Por este noticiero,
y por esta nueva etapa, bienvenido, pues, el premio al periodista de siempre.