La familia llega a España y espera enjuicien a culpables

Liberan a guardias de una disco que golpearon a migrante ecuatoriano

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 7 de febrero. Tres de los cuatro guardias de una discoteca que golpearon y arrojaron al mar al ecuatoriano Wilson Pacheco, cuyo cadáver fue rescatado en un puerto de Barcelona el 28 de enero, fueron puestos hoy en libertad bajo fianza por el juzgado instructor del caso.

La familia del migrante (su esposa y sus tres hijos de entre dos meses y seis años) viajó desde Ecuador para asistir al entierro, a la espera de que finalice la segunda autopsia, y que se juzgue a los culpables.

La juez María Asunción González Ferrero, instructora del caso, decretó la libertad bajo fianza con 5 mil dólares para los cuatro responsables de la agresión, entre ellos James Anglada, quien logró huir del país tras la muerte de Pacheco, pero fue arrestado días después en Francia. Los cuatro acusados tienen un largo historial de agresiones racistas y xenófobas. No obstante, la magistrada considera que "no hay riesgo de fuga".

La juez adelantó que los hombres podrían no ser juzgados por asesinato, pues la primera autopsia que se hizo al cuerpo de Pacheco sólo mostró golpes y rotura de la nariz, lesiones que no justifican la prisión provisional. González desestimó también la solicitud de la fiscalía de condenar a los acusados a 15 años de prisión, y sostuvo que en todo caso se les acusará de "omisión de impedir un delito", que se castiga con entre seis meses y dos años de prisión.

Una cámara de seguridad captó los hechos esa noche de sábado, cuando Pacheco y sus tres hermanos acudieron a la discoteca Mojito, en el Puerto Olímpico. Los guardias se enfrascaron en una discusión con los ecuatorianos, a los que negaron el ingreso a la disco, y Pacheco le dio un botellazo en una mano a uno de ellos. De inmediato, los cuatro guardias rodearon al joven y comenzaron a golpearlo. Pacheco yacía en el suelo cuando Anglada le dio una patada con la que lo arrojó al mar. "Sabrá nadar la rata, y si no, que se ahogue", dijo el atacante ante la mirada de 30 personas que estaban en la calle en ese momento.

El gobierno local ha ofrecido a Ivonne Guznay, la esposa de Pacheco, una visa de trabajo para quedarse a vivir en Barcelona junto con sus hijas de seis y cinco años y un bebé de dos meses.

Por otra parte, la policía española interceptó a un migrante marroquí de 19 años que intentó ingresar a España en la maleta de un amigo. Según la comisaría de Ceuta, los agentes fronterizos detectaron un peso sospechoso en maleta y descubrieron en su interior al joven marroquí.