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Ť Abogada cuestiona el certificado de defunción del ex Beatle
Verlo reír y tomarlo de la mano fue lo mejor, dice McCartney de su último encuentro con Harrison
REUTERS
Londres y Los Angeles. El ex Beatle Paul McCartney habló el jueves de su conmovedora despedida de George Harrison, cuando rió, bromeó y sostuvo la mano de su ex compañero del cuarteto de Liverpool.
"Lo mejor para mí fue verlo reír y bromear durante un par de horas, y tomarle la mano", dijo al referirse a su último encuentro, apenas dos semanas antes de la muerte de Harrison.
"Después comprendí que nunca, nunca más tomaría su mano. Habíamos ido a la escuela y abordado autobuses juntos y no nos agarrábamos de las manos", dijo McCartney a BBC Radio.
"Fue como una compensación. El estuvo frotando su dedo pulgar en mi mano y fue muy agradable."
Tras la muerte de Harrison el mes pasado, McCartney lamentó la partida del Beatle al que cariñosamente llamó "hermano menor".
El jueves, McCartney acudió a la BBC para interpretar en vivo su nueva canción en homenaje a Nueva York, Freedom.
Supuesta cortina de humo
Por otro lado, en Los Angeles, una abogada presentó una queja oficial por la exactitud del certificado de defunción del ex Beatle George Harrison, pues incluye una dirección aparentemente inexistente como el lugar donde ocurrió el deceso.
Gloria Alfred, famosa por su defensa de causas que acaparan titulares, explicó que presentó la queja ante la policía de Los Angeles el jueves, luego que informaciones de prensa hablaron de una supuesta cortina de humo para evitar que el sitio donde murió el músico se convierta en un macabro centro de atracción turística.
"Hay que dejar pasar todas las cosas, menos esto", dijo Alfred a los periodistas, señalando que "está en juego la integridad de los documentos públicos."
"Las celebridades y/o sus seguidores no están por sobre la ley, aun cuando estén procediendo con buenas intenciones, como cuando se trata de proteger la privacidad de los seres queridos", agregó.
Harrison murió el 29 de noviembre de cáncer de pulmón en la casa de su amigo y experto en seguridad Gavin de Becker, según se informó oficialmente.
El certificado de defunción, sin embargo, contiene una dirección diferente, que de acuerdo con las autoridades postales y otras aparentemente no existe.
Un portavoz de la policía de Los Angeles dijo el miércoles que nadie ha sido acusado de algún delito por lo de la dirección, señalando que la práctica era usada a veces por gente famosa para evitar que el lugar del fallecimiento fuera invadido por los admiradores o buscadores de recuerdos.
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