En picada, el crédito de la banca privada a empresas y personas

Ť La capitalización de otras entidades alcanzó, al cierre del tercer trimestre del año, $926 mil 700 millones, cantidad equivalente a 16.6 por ciento del PIB, según reportes del BdeM

ROBERTO GONZALEZ AMADOR

El crédito de la banca privada a empresas y personas continuó en picada este año, mientras que los préstamos otorgados por sociedades de ahorro y cadenas de tiendas departamentales se convirtieron en la principal fuente de financiamiento para adquirir bienes de consumo, indicaron informes oficiales.

El financiamiento otorgado por entidades no bancarias alcanzó, al cierre del tercer trimestre de este año, 926 mil 700 millones de pesos, cantidad equivalente a 16.6 por ciento del producto interno bruto (PIB), señalaron reportes del Banco de México citados por el Grupo Financiero BBVA Bancomer.

En contraste, el financiamiento directo otorgado por la banca comercial para financiar consumo, adquisición de vivienda y a empresas alcanzó a septiembre pasado un saldo de 511 mil 100 millones de pesos, cantidad equivalente a 9.15 por ciento del PIB, de acuerdo con el banco central.

La participación de la banca comercial en el financiamiento ha disminuido desde la crisis de 1995, aun cuando las instituciones de crédito han recibido apoyos del gobierno para evitar su quiebra por un monto que actualmente alcanza 730 mil millones de pesos.

En un informe difundido esta semana, BBVA Bancomer indicó que el financiamiento no bancario (FNB) al sector privado, que compite o suple al que otorgan las instituciones bancarias en sus distintas actividades, continuó este año como importante fuente alternativa al crédito de la banca comercial.

Con base en información del Banco de México, Bancomer señaló que a septiembre de 2001 el FNB ascendió a 926 mil 700 millones de pesos, cantidad que reflejó un decremento en términos reales de 5.9 por ciento en comparación con el registrado en el mismo mes de 2000, y representó 16.6 por ciento del PIB.

Bancomer señaló que la caída del FNB en septiembre puede ser atribuida a los efectos de la desaceleración económica, que ha llevado a la economía nacional a registrar tasas negativas de crecimiento, lo que derivó en una disminución de las solicitudes de crédito.

El grupo financiero, que es el segundo más importante del país después de Banamex, recordó que la importancia del FNB en la economía ha ido en ascenso, al registrar una tasa de crecimiento real de 44.8 por ciento entre 1996 y 2000.

Indicó que el financiamiento al consumo y vivienda ha sido el más dinámico, dado que ha crecido, entre 1996 y 2000, en 263.5 y 388.7 por ciento, respectivamente, mientras que el canalizado a las empresas lo hizo a un ritmo de 36.5 por ciento en ese lapso.

Frente a estas tasas de crecimiento, el financiamiento de la banca comercial al sector privado acumula, sólo en este año, una caída de 6 por ciento, según reportes del Banco de México.

Bancomer indicó que el FNB al consumo proveniente de las sociedades de ahorro y préstamo, de las principales cadenas de tiendas departamentales y de las sociedades financieras de objeto limitado enfocadas a otorgar créditos al consumo llegó a 59 mil 100 millones de pesos sólo en el mes de septiembre pasado.

En tanto, el financiamiento no bancario otorgado por las Sociedades Financieras de Objeto Limitado hipotecarias totalizó 39 mil 500 millones de pesos en septiembre de 2001, lo que representó una expansión de 36.4 por ciento anual. "Ante la ausencia de la banca en este mercado, su evolución ha sido muy favorable, ya que en muchos casos los créditos hipotecarios que conceden están vinculados a los programas de fomento a la vivienda de las instituciones oficiales y esto les ha facilitado su buen comportamiento", agregó.

Por su parte, el FNB a las empresas, tanto externo proveniente de la colocación de deuda en los mercados financieros internacionales, como interno -por colocación de deuda en el mercado local y proveedores- alcanzó 831 mil millones de pesos en septiembre, una baja anual de 8.3 por ciento.

Bancomer estimó que el FNB continuará creciendo a corto y largo plazos, debido a que se trata de un tipo de crédito que se puede arraigar fácilmente en los hábitos de los consumidores y en las prácticas comerciales de las empresas.