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Ť Fuentes oficiales aseguran que basta con la autorización del Presidente
Reiteran en la Armada que no necesitan permiso del Senado
JESUS ARANDA
El alto mando de la Secretaría de Marina y la consejería jurídica de la Presidencia de la República consideran que la participación de México -el próximo año- en la operación multinacional Unitas (United of Internacional Antisubmarine Warfare) no requiere de permiso del Senado, porque se trata de una misión que no tiene objetivos bélicos, afirmaron fuentes oficiales, las cuales precisaron que la aprobación del presidente Vicente Fox resulta suficiente para que los buques de la Armada participen en dichas maniobras.
Los informantes, por otra parte, desmintieron la versión de que la Armada de México haya participado en las maniobras Unitas 2001 que se realizaron en agosto pasado en aguas de Colombia, y enfatizaron que nuestro país únicamente contó con observadores en esas prácticas. Asimismo, aseguraron que los buques nacionales nunca han tomado parte en ejercicios navales bélicos con otras naciones.
El secretario de Marina, almirante Marco Antonio Peyrot, se negó a opinar sobre el tema.
Según las fuentes oficiales consultadas sobre la polémica que generaron las palabras del canciller Jorge Castañeda ante senadores, en el sentido de que México participaría en las maniobras Unitas que se llevarán a cabo el año próximo, sobre las cuales los legisladores dijeron no tener conocimiento, existen antecedentes que acreditan la salida del territorio nacional de integrantes de las fuerzas armadas mexicanas.
Una prueba de su salida al exterior, "sin que haya mediado la autorización del Senado", es el apoyo que el Ejército y la Armada dieron a naciones hermanas en casos de desastres naturales, como fueron los sismos en El Salvador y los daños causados por el huracán Mitch en Guatemala y Nicaragua.
Subrayaron que las maniobras Unitas no implican actos bélicos de las fuerzas que en ellas participan, como tampoco se interviene contra nación alguna, ya que se trata sólo de ejercicios navales, por lo que "no se encuentra ante la presencia de elemento alguno que permita suponer que la colaboración activa de la Armada en las maniobras comprometa la política exterior tradicional de México, como tampoco compromete sus relaciones con otros países".
De acuerdo con esta versión, la Armada ya ha tomado parte con otros países en maniobras navales no bélicas, consistentes en la realización de evoluciones en alta mar, como las que llevan a cabo buques de todo el mundo de manera cotidiana y como parte de sus actividades rutinarias.
Precisaron también que las maniobras navales se distinguen de los ejercicios bélicos en que los buques que participan se limitan únicamente a evoluciones conjuntas que no implican de manera alguna tácticas de guerra o prácticas de tiro o fuego real.
Cabe recordar que hace unos meses un destructor francés participó en maniobras de este tipo con buques de la Armada en el Golfo de México, sin que se suscitara problema alguno.
En este tipo de acciones se entrena en aspectos tales como: transferencia de personal y carga entre dos buques; reabastecimiento de combustible, víveres y carga de una embarcación a otra en plena navegación; maniobras de búsqueda y salvamento de personas en la mar, así como recuperación de hombres caídos de las propias naves al agua, y maniobras de inspección de barcos sospechosos de realizar ilícitos, como narcotráfico, piratería, tráfico de personas, etcétera.
De maniobras como las de Unitas -en las de este año que se realizaron en Colombia tomaron parte, además del país sede, 5 mil 500 marinos de Estados Unidos, Ecuador, Perú y Chile- la Armada de México obtendría beneficios tales como: incrementar el adiestramiento del personal, así como sus conocimientos y experiencias en la operación de diferentes equipos y sistemas de las unidades de superficie que participen.
Además se obtendría un intercambio de información actualizada en cuanto al desarrollo de nuevas estrategias para el combate de las amenazas en la mar, y se reforzarían los lazos de cooperación mutua entre las armadas de los países participantes.
Los funcionarios explicaron que no es nuevo que la Armada de México realice actividades en el extranjero, en ejercicio de sus atribuciones. Entre éstas destacan los viajes del buque-escuela Cuauhtémoc, en el que año tras año los cadetes de último grado hacen sus prácticas alrededor del mundo, por lo que se le conoce también como Embajador Mexicano.
Además, la participación de marinos en programas de adiestramiento y capacitación en cursos en el extranjero, y el apoyo de buques mexicanos a naciones amigas en casos de desastre.
Cabe señalar que de acuerdo con reportes de prensa fechados en Colombia y Venezuela, durante las maniobras Unitas 2001 que se desarrollaron en agosto pasado, los buques participantes realizaron ejercicios bajo el agua y de contrataque desde la superficie y desde el aire. Las actividades estuvieron dirigidas por el comandante de la fuerza naval de Estados Unidos en el Comando Sur, almirante Kevin Green.
El objetivo del ejercicio, se dijo en comunicados oficiales de la embajada de Estados Unidos en Colombia, tuvo el propósito de promover la amistad, el profesionalismo y el entendimiento mutuo.
Estas maniobras se desarrollan desde 1959 a iniciativa de Estados Unidos.
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