Señora directora: ¿Cómo, cuándo y quién dará respuesta al asesinato de nuestra compañera Digna Ochoa? A más de un año de la supuesta transición democrática en nuestro país, y una vez que gran parte de la sociedad mexicana había puesto sus esperanzas en el ideal de un cambio social y político, podemos observar, de manera indignante, que con la muerte de Digna Ochoa las expectativas de un país distinto están muy distantes de nuestra realidad.

Cuando se perpetraba el acto cobarde, el presidente Fox aseguraba a la opinión pública internacional que el país se encontraba en condiciones de normalidad, hecho que revela el "doble discurso" que como estrategia de minimización de los problemas nacionales se sigue usando con frecuencia desde la esfera del poder público; o bien, la continuación de las prácticas que gobiernos anteriores utilizaban para omitir, de manera clara, las problemáticas que aquejan a México.

¿Qué ha cambiado hasta la fecha? ¿Hasta cuándo la misma historia de impunidad?

Con el asesinato de una de las defensoras de derechos humanos más congruentes en nuestro país, no sólo se atenta contra la vida, sino contra el papel tan importante que han cobrado las ONG y los luchadores de derechos humanos en el proceso de transformación democrática. 

Se deja al descubierto el escenario más crudo al que no queríamos llegar: un retroceso de los logros en materia de cultura democrática. El escenario más sombrío de la guerra sucia. El escenario del temor y el clima de hostigamiento contra los defensores de derechos humanos en nuestro país.

El asesinato de Digna Ochoa no se encuentra aislado. Hace pocos meses se realizaron atentados contra el Comité de Derechos Humanos Fray Pedro Lorenzo de la Nada, en Ocosingo, Chiapas, y hace pocos días integrantes del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas fueron amenazados de nueva cuenta. Hace más de cinco años que el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez era hostigado sistemáticamente por parte de sus detractores. 

Lo más preocupante aún es que, por más que reiteradas voces exijan justicia, asesinatos como el de Acteal, Aguas Blancas y El Charco siguen sin aclaración alguna.

¿Cómo, cuándo y quién dará respuesta?, preguntamos de nuevo. ¿Cuántos asesinatos más se necesitan para que en este país se cruce la línea de la justicia y se rompa por fin el silencio cómplice de la impunidad?

Desde aquí observamos con profunda preocupación la negligencia que, por parte del gobierno federal, se ha repetido durante mucho tiempo. Observamos también ?y lo señalamos categóricamente? que de prevalecer el clima de impunidad se corre el riesgo de que más hechos como este se repitan de forma deliberada. 

Es urgente que se actúe de manera inmediata. Rechazamos todo intento de postergar la respuesta. De no ser así, quedará en evidencia la complicidad de los órganos de procuración y administración de justicia de nuestro país. 

¡No más silencio. Exigimos justicia!

Comisión de Justicia y Paz de la Familia Dominicana y Centro de Derechos Humanos Fran Francisco de Vitoria OP

México debe impulsar acciones antibélicas en la agenda bilateral 

Señora directora: Los participantes en el foro Globalización, Terrorismo y Guerra, convocado por la Fundación Heberto Castillo Martínez, condenamos enérgicamente el terrorismo en todas sus formas, sea en Nueva York, Washington, Afganistán o Asia central, porque lesiona gravemente, contra todo derecho, a la población civil.

Las acciones bélicas desatadas desde hace más de 20 días por el gobierno de Estados Unidos, al frente de una coalición de países, tienen graves repercusiones en nuestro país, ya que el Presidente de aquella nación ha recibido de su Congreso plenos poderes de guerra.

Dado que nuestro principal socio comercial se encuentra, de hecho, en un estado formal y operativo de guerra, cualquier decisión bilateral entre ambos países puede tener repercusiones de largo alcance, particularmente en lo que se refiere a la tipificación del terrorismo y la forma de enfrentarlo en el escenario internacional.

Una decisión precipitada y torpe en esta materia puede poner en entredicho la integridad, jurisdiccionalidad y soberanía territorial de México, fundamento de la seguridad de la población y del control nacional de los recursos estratégicos.

Consideramos que en este marco, nuestro gobierno está obligado a someter todas estas acciones violentas a las exigencias del derecho internacional y bajo la competencia de la ONU. Pedimos el cese de los bombardeos en Afganistán y de las amenazas de guerra a los demás países del Asia central.

México debe impulsar las medidas antiterroristas en la agenda bilateral sólo desde el marco de la creación de una espacio único, universal, lo que supone, necesariamente, la ratificación del estatuto de la Corte Penal Internacional y la conceptualización del terrorismo como un crimen contra la humanidad, perseguible bajo el principio de justicia penal universal.

Miguel Concha, Víctor Flores Olea, Adolfo Gilly, John Saxe Fernández, Luis Villoro, María Teresa Juárez de Castillo, Heberto Castillo Juárez, Javier Castillo Juárez, Laura Itzel Castillo Juárez, Daniel López Capistrán, Luis Daniel Sáinz y 80 firmas más

Condenan el crimen contra Digna

Señora directora: Las participantes en la Reunión Latinoamericana sobre Feminismo y Educación en América Latina, llevada a cabo del 21 al 26 del mes en curso en la ciudad de México, manifestamos nuestro profundo pesar e indignación por el reciente asesinato de Digna Ochoa, abogada dedicada a la defensa de los derechos humanos de las minorías desprotegidas en México.

Consideramos que la respuesta pública frente a este acto por parte del aparato de Estado mexicano, ha exhibido con claridad un contraste entre el énfasis que expone en las cuestiones económicas y el lamentable descuido en los aspectos relacionados con derechos sociales y humanos.

En nuestros países es de vital importancia contar con mujeres dedicadas a la defensa de los derechos más elementales de los seres humanos.

Como investigadoras, activistas y maestras dedicadas a la educación, consideramos que las agresiones contra personas que son símbolos de justicia para nuestras naciones, como el caso Digna Ochoa, implican graves retrocesos ante tareas conjuntas como la de educar para la paz.

Hacemos un llamado enérgico a las autoridades competentes para que lleven a cabo las acciones pertinentes que contribuyan al pronto esclarecimiento de este crimen y demandamos que se preste la debida protección a las organizaciones y personas dedicadas a la defensa de los derechos humanos. Nos sumamos a la pena que embarga a la familia y compañeros de Digna.

Graciela Morgade (Universidad de Buenos Aires), Ma. Elvía Domínguez Blanco (Universidad Nacional de Colombia), Imelda Arana Sáenz (Corporación Centro de Estudios de la Mujer y la Educación, Colombia) y 16 firmas más

Protestan por la reducción de becas

Señora directora: Con esta carta deseamos unirnos a la indignación de otras instituciones educativas ante el injustificado recorte presupuestal a las becas de maestría y doctorado, con el pretexto de avanzar hacia una excelencia educativa. Creemos que tal propósito no se logrará con un doble lenguaje, el cual, por un lado, se jacta de impulsar un proyecto educativo de calidad, en pro de la competitividad y productividad, y por otro, se limita a la educación a través de un injustificado recorte al financiamiento de las becas para realizar estudios de postgrado. 

Estamos convencidos que el avance hacia una sociedad más humana, reflexiva y crítica, tan necesaria en estos tiempos de terrible caos y deshumanización, sólo se conseguirá a través del potenciamiento de las ciencias sociales y humanidades como herramientas esenciales. Con este injustificado recorte de becas se reducen las posibilidades de formar a hombres y mujeres con capacidad de pensamiento y sensibilidad para atender problemas sociales que nos aquejan a todos como seres humanos. Consideramos que la reducción del presupuesto de la educación de posgrado significa un atentado contra el derecho que todos tenemos en este país que se pretende democrático y de cambios.

Colegio de Postgraduados: Fabiana Sánchez, Blanca M. Gutiérrez y 19 firmas más