Una de ellas es la reforma a los artículos 4o. y 27 de la Constitución, en los que se garantiza desde la carta magna, las pensiones para adultos mayores a partir de los 65 años.
Regresa al Infonavit la posibilidad de construir casas habitación, parte de ellas para arrendar, “sin que impere la ley del mercado, del lucro o de la utilidad”.
Se garantiza el derecho a una vivienda digna, así como la entrega de apoyos a personas con discapacidad. Reduce además a 65 el otorgamiento de pensión a adultos mayores.