En un comunicado, la UNAM informó que retomó las instalaciones tras alcanzar acuerdos con estudiantes y padres de familia en lo relativo a reforzar la seguridad en inmediaciones del plantel.
Dos días antes de los hechos violentos que provocaron la muerte de un estudiante de la UNAM, grupos porriles habían acudido al plantel para arrojar petardos.