Los vecinos pidieron que los dejen disfrutar un momento de esparcimiento y señalaron que no hay venta de drogas, como acusó la alcaldesa Sandra Cuevas.
Algunos vecinos de la colonia consideraron que la inspección “es en venganza porque evitaron que le quitaran a los músicos sus instrumentos” luego del zafarrancho.
La alcaldesa Sandra Cuevas reiteró que retirar el sonidero de la Alameda (que lleva 12 años impartiendo actividades culturales) es “una decisión tomada”.