El cierre de la emergencia zoosanitaria se establece luego de que Senasica constató la ausencia del virus durante las últimas ocho semanas en aves silvestres, granjas de traspatio y unidades tecnificadas.
Entre octubre de 2022 y marzo de 2023, Senasica atendió 56 focos de la enfermedad en 13 entidades y se sacrificaron 6 millones de aves, para evitar la diseminación.
Se mantiene comunicación con el Departamento de Agricultura de EU desde que se detectó un brote de la enfermedad en una granja de Indiana, en febrero pasado.