Elementos de la corporación localizaron a las personas engañadas y evitaron que pagaran las extorsiones exigidas por los delincuentes.

Un niño de 9 años fue engañado para salir de su casa mientras su madre recibía una llamada para extorsionarla.

Julio Manuel Reyes Zúñiga realizaba “secuestros virtuales”. Llamaba a connacionales en el sur de California, pidiéndoles rescate por algún familiar.

Una de las víctimas señala que no fue sólo un secuestro virtual, ya que fueron robados y golpeados durante las 15 horas de su cautiverio.

Las amenazas se realizaron por teléfono. Los delincuentes les advirtieron que tenían el control de las cámaras del hotel donde se hospedaban y que si salían a la calle atentarían contra sus vidas.