En la primera fase de cinco años de trabajo, que incluyó la investigación del delicado proceso de eliminación del barniz, el lienzo de 3.8 por 4.5 metros se volvió a estirar.
La mayoría del patrimonio dañado son templos construidos entre los siglos XVI y XIX, y acusaban décadas de abandono, son mantenimiento preventivo, se informó.
El costo de las renovación del inmueble asciende a cinco mil 900 millones de dólares, informaron responsables del edificio sede del parlamento británico.
Educación y medidas persuasivas son necesarias para evitar las agresiones al patrimonio cultural, dijo Gabriel Merigo, encargado de restauración de esculturas.