Anteriormente estas agresiones se acotaban a la inseguridad en las rutas, pero ahora se dan en campamentos urbanos por la misma población que está dentro o cerca de éstos, alertan.
Se ha registrado un alza en casos de violencia sexual, cobro de suelo, extorsión y secuestro contra esas personas, además de escasez de albergues seguros y dignos, advierte.