El barco resultó dañado tras recibir el jueves un ataque por parte de los hutíes que provocó graves inundaciones en el interior y daños en la sala de máquinas.
Otros 13 buques fueron desviados esta semana, lo que eleva el total de carga desviada de la ruta del mar Rojo a unos 5.2 millones de toneladas métricas de cereales en unos 90 buques.
Han estado atacando buques comerciales con drones y misiles desde mediados de noviembre, en lo que describen como actos de solidaridad con los palestinos.
La fuerte caída de los precios de los fletes tras la pandemia provocó el desplome de las ventas y los beneficios de la naviera alemana de contenedores Hapag-Lloyd.
Se ha corroborado que los integrantes de la tripulación del buque "Galaxy Leader" se encuentran en buen estado de salud, sin sufrir de algún maltrato o abuso.
Líderes empresariales advirtieron que los ataques de los hutíes de Yemen podrían afectar a las cadenas de suministro durante meses y provocar escasez de buques cisterna para transportar combustible.
Los desvíos en respuesta a los atentados han provocado que los viajes entre centros de producción asiáticos y consumidores europeos tarden hasta 20 días más.
El presidente Joe Biden dijo que los ataques tenían como objetivo demostrar que EU y sus aliados “no tolerarán” los incesantes ataques de los hutíes en el mar Rojo.
Lloyd Austin ha estado hospitalizado desde el pasado lunes 1° de enero por un problema médico no especificado, informó el Pentágono este viernes por la noche.
Hapag-Lloyd indicó que redirigiría 25 buques a finales de año desde la vía navegable clave, ya que las tarifas de flete y las existencias de transporte han aumentado debido a la interrupción.
Alrededor de 12 por ciento del tráfico marítimo mundial transita por el mar Rojo, que se ubica en la cuenca del océano Índico y está unido al mar Mediterráneo.
La danesa Maersk, la alemana Hapag-Lloyd, la francesa CMA CGM y la italo-suiza MSC indicaron que sus barcos ya no pasarán por el mar Rojo “hasta nuevo aviso”.
“La reciente ola de ataques ilegales representa una amenaza directa para el comercio internacional y la seguridad marítima” en la zona, declaró en la red social X el ministro de Defensa británico.