Consideró que “no se vale enviar una iniciativa con mala fe y después decir la corregimos en el Congreso”, ni tampoco “ se puede seguir legislando para que con dinero de los trabajadores se financie al Estado mexicano”.
Tampoco quiso opinar sobre la bancada tan pequeña, de apenas 14 integrantes, que tendrá el PRI en la legislatura que inicia la próxima semana, ni el reto que significa que el partido esté dividido.
Durante un encuentro político, dijo que frente a un gobierno que puede ser malo, bueno e incluso con tentaciones autoritarias, la vía del cambio son las elecciones.