El filme se estrena ocho meses después de su exhibición en el resto del mundo y con dudas sobre cómo se recibiría el tema nuclear en el único país que sufrió un bombardeo atómico.
A 78 años de que Estados Unidos lanzó una bomba atómica sobre la ciudad japonesa de Hiroshima, el aniversario del hecho no fue registrado por los medios de comunicación estadunidenses.