Las organizaciones de búsqueda de personas desaparecidas acusaron que el manejo de los restos compromete su viabilidad para obtener información que permita su reconocimiento.
La fosa fue ubicada en un terreno baldío cerca del poblado Loma Blanca; en este mismo lugar el año pasado fueron encontrados los restos de otras seis personas.
En el hallazgo participaron el titular y personal del grupo Zorro de la Fiscalía Especializada en la Investigación en Materia de Desaparición de Personas.
La Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México señaló que hay decenas de cadáveres de felinos enterrados que al parecer fueron sacrificados.
La líder de buscadoras en Cajeme dijo que los criminales entierran a sus víctimas en patios de domicilios particulares, por lo que requieren una orden de cateo.
Durante las jornadas de rastreo se han recabado dos lotes de restos óseos, los cuales ya son analizados por el Instituto Jaliscience de Ciencias Forenses.
La activista Monserrat Castillo afirmó que el gobierno de Cuauhtémoc Blanco no ha atendido el problema de la desaparición de personas de manera responsable.