El cargo se relaciona con dos accidentes del 737 MAX en Indonesia y Etiopía durante un período de cinco meses en 2018 y 2019 donde murieron 346 personas.
El cambio ocurre luego que un avión de la aerolínea Alaska Airlines sufriera el desprendimiento de un panel del fuselaje en pleno vuelo el 5 de enero, lo cual llevó a un aterrizaje de emergencia.