Cáceres fue visto por última vez el domingo pasado cuando a bordo de su vehículo se dirigía a su domicilio particular, en Nicolas Bravo, al sur de la capital de Quintana Roo.
El hombre recibió una condena de 7 años en prisión, una multa como pago para reparar el daño, orden de disculpa pública, destitución laboral en el hospital federal y suspensión de sus derechos políticos y civiles.