Por temor a las represalias nadie protesta ni habla del crimen, dijo durante el novenario un amigo de la familia de Marco Antonio Arcos Fuentes.

El último caso fue el de Marco Antonio Arcos Fuentes, comisario de Jaleaca de Catalán, el viernes en Chilpancingo, Guerrero.

Fue ejecutado a balazos por un grupo armado mientras comía en una taquería en Chilpancingo. El activista también era comisario de Jaleaca de Catalán.

Explican que fue encarcelado porque su comunidad tuvo el valor de defender los bosques, aun a costa de confrontarse con la cabecera municipal.

La legisladora por Yucatán pertenecía al Partido Verde Ecologista de México.