De acuerdo con datos del Banco de México (BdeM), el tipo de cambio mostró una elevada volatilidad durante la sesión de este jueves, al operar entre un máximo de 20.5100 unidades y un mínimo de 20.2990 unidades.
En México, aunque los precios al consumidor de octubre aumentaron, no cambiaron las perspectivas de que BdeM volverá a recortar su tasa de fondeo la próxima semana.
En operaciones al mayoreo, el tipo de cambio cerró en 19.9684, una pérdida de 11 centavos (0.59 por ciento) para la moneda mexicana, que en la semana retrocedió 8 centavos (1.41 por ciento) frente al dólar.
En lo que va del año, la moneda mexicana acumula un retroceso de 17.2 por ciento y analistas e inversores creen que podría seguir presionado al menos en el corto plazo.
De acuerdo con datos del Banco de México, el tipo de cambio operó en el mercado interbancario entre un máximo de 19.9210 unidades y un mínimo de 19.7580 unidades.
El tipo de cambio mostró señales de debilitamiento tras conocer las cifras de inflación y del PIB, que ambas variables macroeconómicas se desaceleraron en México.
Ante la caída global de los mercados este lunes, la virtual presidenta electa dijo que no hay que precipitarse a declarar una recesión en Estados Unidos.
En la primera jornada de agosto, los inversionistas siguieron analizando que la Reserva Federal de EU allanó una posibilidad de bajar las tasas de interés en septiembre.
En la sesión, el tipo de cambio terminó prácticamente estable, al cerrar en 18.44 pesos por dólar en operaciones al mayoreo, una recuperación de apenas 9 centavos (0.05 por ciento) para la moneda mexicana.
De ahí que el peso mexicano volvió a registrar un revés, al depreciarse este jueves 0.47 por ciento, para cerrar nuevamente arriba del nivel psicológico de 17 unidades, a 17.0566 pesos por dólar spot.